Celebraciones a la antigua usanza
En nuestro país, más de un millón de seguidores de la Iglesia Cristiana Ortodoxa celebran la Navidad a la antigua usanza, especialmente rusos, lipovanos, ucranianos, moldavos y serbios.
Ana-Maria Cononovici, 14.01.2025, 14:04
En nuestro país, más de un millón de seguidores de la Iglesia Cristiana Ortodoxa celebran la Navidad a la antigua usanza, especialmente rusos, lipovanos, ucranianos, moldavos y serbios. En varias zonas del país, la Navidad y el Año Nuevo se organizan al estilo antiguo: el 7 de enero y la noche del 13 al 14 del mismo mes, respectivamente.
Las tradiciones y costumbres observadas en la celebración de la Navidad al estilo antiguo tienen muchas similitudes con las de diciembre. Los creyentes se visten con trajes tradicionales y cantan villancicos. La familia se reúne para la Santa Cena, un momento importante de la celebración.
Paul Condrat, un lipovano de Jurilovca, nos cuenta sobre las fiestas, ya que son organizadas por la comunidad lipovana:
«Los lipovanos son étnicamente rusos, pero confesionalmente ortodoxos al estilo antiguo. Se trata de la ortodoxia arcaica y original. La única diferencia con el resto de la Ortodoxia no es solo el calendario, es decir, el juliano o el gregoriano, el nuevo o el viejo. También hay algunas diferencias de culto. Hoy en día, las tradiciones se siguen respetando bastante mucho. Las fiestas son un poco diferentes, la Navidad y el Año Nuevo se celebran más bien en familia, en pequeñas fiestas. La Nochevieja es una velada tranquila, sin fiestas. En vísperas de Navidad, los niños mayores, los jóvenes cantan villancicos. El día de Año Nuevo, el primer día del año, los niños más pequeños suelen cantar villancicos. Hay muchos elementos en común con Plugușorul. Solo hay un villancico, comienza con las palabras: Dios camina por los campos, no es una traducción muy adecuada, es una traducción palabra por palabra, pero marca la transición al Año Nuevo. Desean un nuevo año con buena suerte y nuevas oportunidades».
Le preguntamos a Paul Condrat si hay platos específicos destinados a traer esta buena suerte, tal como dice en el deseo:
«No particularmente, pero de alguna manera las palabras de los villancicos también se pueden encontrar en la mesa. Prefiero mencionar un pastel, un postre, en realidad una especie de galletas, con una forma cercana a las nueces (un postre a base de coca que imita la forma de las nueces), pero sin nata. Un rebozado sencillo y delicioso».
Más allá de la tradición, estas fiestas a la antigua usanza se han convertido en una buena excusa para que los fiesteros de otras religiones continúen con la diversión. ¿Cuáles son las tentaciones preparadas para los turistas? Paul Condrat nos responde:
«La gastronomía tradicional del pescado local y, por supuesto, con motivo de las vacaciones de invierno, en la oferta de las casas de huéspedes locales, también tenemos platos tradicionales de cerdo: sarmale (rollitos de hojas de col con relleno de carne picada), estofado de cerdo; en cambio, de los platos tradicionales de pescado, la sopa de remolacha de pescado es muy apreciada, no puede faltar en ninguna comida. Y luego están otros platos de pescado, como por ejemplo los bocadillos de pescado, el pescado ahumado, las huevas, varios tipos de pescado marinado o las albóndigas de pescado».
En la comunidad ucraniana del norte de Rumanía, por ejemplo, las amas de casa preparan los 12 platos de ayuno para la cena de Nochebuena, utilizando champiñones, judías, harina, harina de maíz, patatas y chucrut. Para obtener los 12 platos, se elaboran varios platos con el mismo ingrediente. Un plato específico es un tipo de empanadas hechas con harina blanca, rellenas de mermelada, nueces y chucrut al gusto. La sopa de chucrut y los sarmale rellenos de harina de maíz molida son platos que tampoco faltan en ningún hogar.
Para los ucranianos en Maramureş, la tradición exige que se coloquen nueve platos en la mesa de Navidad, simbolizando la riqueza del año. La comida más importante es la hrebleanca, un plato hecho de champiñones cocinados con jugo de repollo. Además, el trigo hervido, símbolo de la riqueza, o el pescado no pueden faltar en la mesa. Otra costumbre específica de la zona es que las patas de la mesa se atan con una cadena que permanece así hasta la Epifanía al estilo antiguo, y de esta manera se cree que el bien permanecerá en la casa. Entre los postres navideños tradicionales de los ucranianos, destaca el trigo cocido con nueces o amapola, endulzado con miel, y las rosquillas rellenas de mermelada.
En cuanto a la comunidad de serbios en el Banato, dan la bienvenida a la Navidad con platos de pescado, cerdo asado y un pastel llamado cesniţa, con muchos frutos secos y miel, para que el próximo año sea dulce y gentil. Antes de hornear este pastel, se colocan dos monedas en su interior, y aquellos que las encuentren tendrán buena suerte durante todo el año.
Paul Condrat, de Jurilovca, concluye con un deseo:
«Nuestro deseo de Año Nuevo: ¡un nuevo año con buena suerte y nuevas oportunidades! (en ruso)».
¡Que nos vaya bien a todos, tanto si empezamos el año ahora como si lo hayamos hecho antes!
Versión en español: Mihaela Stoian