Gusto, refinamiento y sociabilidad en Bucarest en la primera mitad del siglo XX
La exposición «Gusto, refinamiento y sociabilidad en Bucarest en la primera mitad del siglo XX» tiene como objetivo reconstruir un fragmento de la vida cotidiana en la manera que lo hacía la élite de Bucarest entre la estricta etiqueta anterior a la guerra y las actitudes sociales más relajadas cultivadas en el período de entreguerras.
Ion Puican, 30.11.2024, 10:50
La exposición Gusto, refinamiento y sociabilidad en Bucarest en la primera mitad del siglo XX en la Casa Filipescu-Cesianu en la capital, una de las sedes del Museo Municipal de Bucarest (MMB), tiene como objetivo reconstruir un fragmento de la vida cotidiana, el ritual de servir comidas, en la manera que lo hacía la élite de Bucarest bajo el signo de transformaciones culturales profundas, entre la estricta etiqueta anterior a la guerra y las actitudes sociales más relajadas cultivadas en el período de entreguerras.
Una de las comisarias de la exposición, Andreea Mâniceanu, nos habla sobre la etiqueta de la sociedad de Bucarest a principios del siglo XX:
«En la primera mitad del siglo XX, la etiqueta y el estilo de vida de la élite de Bucarest estaban marcados por varios elementos distintivos, como la influencia occidental, ya que la mayoría de los miembros de la élite de Bucarest se formaron en el extranjero, especialmente en Francia, lo que llevó a la adaptación de los modales y el estilo de vida occidentales. La moda, la arquitectura y las costumbres sociales reflejaron estas influencias».
Andreea Mâniceanu también nos habla de la vestimenta de aquella época:
«La élite de Bucarest también prestó especial atención a la ropa. Los caballeros llevaban trajes elegantes y de moda, inspirados en las tendencias de Europa occidental, y las damas llevaban vestidos muy elegantes, a menudo creados por casas de moda. Además, los bailes y las recepciones eran ocasiones importantes para mostrar esta elegancia».
La exposición también presenta al público la forma en que vivía la élite de Bucarest en la primera mitad del siglo XX, en términos de vivienda y vida social:
«Las residencias de la élite en Bucarest en la primera mitad del siglo XX solían estar situadas en zonas céntricas como Calea Victoriei o Cotroceni, y tenían un estilo arquitectónico ecléctico, combinando elementos neoclásicos, art nouveau o neorrumanos. Los miembros de la élite asistían a bailes, recepciones y cenas que se celebraban en el Palacio Real u otras residencias lujosas. Cafés, discotecas y restaurantes de lujo como Capșa, eran lugares de encuentro de políticos, aristócratas y artistas. La exposición Gusto, refinamiento y sociabilidad explora la transición y las influencias mutuas entre el estilo de vida y el espacio vital en los períodos de preguerra y entreguerras, enfatizando la dinámica entre el exterior y el interior. En el período anterior a la guerra, el estilo de vida aristocrático se definía por la opulencia y un visible refinamiento en la arquitectura y el diseño interior de las casas. Había una fuerte influencia del entorno exterior, especialmente en términos de diseño de espacios interiores inspirados en modelos occidentales y corrientes artísticas como el Barroco. Las casas reflejaban un estilo de vida orientado hacia el espectáculo y el estatus social, y los espacios interiores estaban diseñados para impresionar a los huéspedes. El mobiliario, la decoración y los materiales utilizados en las casas de la preguerra expresaban esta relación de continuidad entre la grandeza exterior e interior. A través de esta alternancia entre las dinámicas exterior-interior e interior-exterior, la exposición pone de relieve cómo los cambios sociales y económicos de las dos épocas influyen en la percepción y organización del espacio doméstico en el período anterior a la guerra. El espacio interior era un reflejo del mundo exterior, las jerarquías sociales y la etiqueta, mientras que en el período de entreguerras los cambios internos en la vida cotidiana y las preferencias estéticas empiezan a moldear la manera en que se percibe y se organiza el espacio exterior».
Andreea Mâniceanu nos habla de la vida cultural de la época:
«La élite de Bucarest también tenía una estrecha conexión con la vida cultural. La ópera, el teatro y las exposiciones de arte eran apreciadas por esta clase social. Además, el mecenazgo del arte y la literatura era una forma de que las élites demostraran su prestigio».
¿Cómo presenta la exposición de la Casa Filipescu-Cesianu la dinámica de las transformaciones de la sociedad de Bucarest en la primera mitad del siglo XX?
«Así, la exposición Gusto, refinamiento y sociabilidad en Bucarest en la primera mitad del siglo XX transmite el mensaje de una evolución de una sociedad centrada en el estatus y el espectáculo a una funcional e individualista, donde la intimidad y el bienestar personal comienzan a prevalecer sobre la ostentación y la grandeza social».
Versión en español: Mihaela Stoian