¿Qué harás cuando seas mayor?
Hace unos meses se inauguró en Bucarest un parque de eduentretenimiento (entretenimiento educativo) cuyo objetivo es enseñar a los niños a aprender jugando en un espacio concebido como una ciudad infantil. Aquí pueden descubrir qué profesión les interesa, un paso necesario dado que normalmente tienen acceso a más información teórica que práctica en el proceso educativo.
Ana-Maria Cononovici, 04.07.2023, 10:40
Hace unos meses se inauguró en Bucarest un parque de eduentretenimiento (entretenimiento educativo) cuyo objetivo es enseñar a los niños a aprender jugando en un espacio concebido como una ciudad infantil. Aquí pueden descubrir qué profesión les interesa, un paso necesario dado que normalmente tienen acceso a más información teórica que práctica en el proceso educativo.
Más detalles sobre esta iniciativa nos aportó Ana-Maria Pascaru, directora de marketing y comunicación del parque:
«Destiny Park es el primer parque de eduentretenimiento de Rumanía. Abrimos el 2 de septiembre, así que ya han pasado 4 meses desde la inauguración. Estamos contentos de haber introducido este concepto en el mercado rumano ya que aprender jugando es algo relativamente nuevo para los rumanos. Este concepto viene a complementar todo lo relacionado con el aprendizaje no formal que los niños pueden recibir fuera del currículo escolar. Nos centramos en niños de 4 a 14 años. Se trata de una franja de edad bastante amplia. Nuestro principal objetivo es, como ya he dicho, educar a través del juego. Es básicamente una ciudad en miniatura. La llamamos una ciudad dirigida por los niños. El parque cuenta con un área industrial con espacios donde los niños vienen y aprenden, por ejemplo, sobre el proceso de fabricación de la leche o el de muebles o cómo se trabaja en la agricultura y cómo será la agricultura del futuro. Hay asimismo una zona dedicada a la medicina que tiene una clínica dental, pero también un hospital que cuenta con varias salas, de neonatos, de cirugía y de urgencias. En todas estas áreas enseñamos a los niños cómo se practican determinadas profesiones. Es cierto, solo estamos sentando las bases aportando determinados conocimientos, pero todo a través del juego, los niños se divierten y acumulan los conocimientos mucho más fácilmente».
Ana-Maria Pascaru, directora de marketing y comunicación, insistió en la importancia del elemento de novedad que estas experiencias aportan a la vida de los niños:
«Si recuerdan, antes solíamos visitar a los padres en el trabajo. Ahora, esto se hace menos. Así que, Destiny Park, es básicamente el lugar al que acuden los niños por primera vez, la mayoría de ellos para aprender cómo se practican determinadas profesiones. Recorrimos el área de informática, medicina, agricultura, industria, el laboratorio de química, aprenden cómo ser piloto de avión o conducir un coche. Para ellos todo resulta muy atractivo porque aprenden mientras juegan».
Otro objetivo de los iniciadores del proyecto fue enseñarles a los niños la responsabilidad social y hay proyectos en marcha para animarlos a participar:
«Llevamos a cabo determinadas campañas de Responsabilidad Social Corporativa Medioambiental. Las iniciamos antes de la apertura del parque, y durante la pandemia realizamos algunas actividades en colaboración con el Hospital Infantil Grigore Alexandrescu. Luego, en agosto, durante dos semanas nos visitaron casi 2.500 niños de entornos desfavorecidos o niños con discapacidad que tuvieron acceso gratuito a nuestras actividades. Es un proyecto que seguimos realizando. Básicamente, en diciembre empezamos a recaudar “dinero mágico. El “dinero mágico es la moneda de nuestra pequeña ciudad. Los niños que entran en el parque, en base a una entrada pagada, reciben un cheque y, luego, dinero mágico. La primera lección que aprenden es de economía, así la llamamos, porque cuando consiguen dinero mágico, con él participan en determinadas actividades; sin embargo, deben pagar para las más divertidas. Cuando trabajan, cobran. El “dinero mágico es la moneda de Destiny Park, consideramos que está bien animar a los niños a donar, enseñarles espíritu cívico y enseñarles también que ofrecer es algo hermoso. Ofrecer algo a los niños de entornos desfavorecidos es algo que empezamos a hacer. Recogemos dinero mágico de los niños, si los niños se quedan con dinero mágico al final de la experiencia, cuando termine la visita al parque, pueden donarlo o irse a casa con él y cuando vuelvan podrán usarlo de nuevo. Y así empezamos a recaudar dinero mágico, y nuestra fundación, básicamente a través de este gesto simbólico, convierte el dinero mágico en entradas gratuitas para niños desfavorecidos».
En el Destiny Park, el primer parque de eduentretenimiento de Rumanía, los niños se divierten, pero también aprenden que el trabajo es muy importante. Nuevamente nos aporta detalles Ana-Maria Pascaru, directora de marketing y comunicación:
Algunos solo trabajan, otros solo intentan divertirse, pero cuando el dinero se acaba, tienen que empezar a trabajar. No existe la posibilidad de pedir dinero a tus padres, porque todo es dinero mágico. Tenemos dos tipos de entradas: de 3 horas y media y de un día. La mayoría de los padres, sobre todo en las primeras visitas, optan por la de 3 horas y media. En 3 horas y 30 minutos los niños no pueden participar en todas las actividades del parque, ya que una actividad dura entre 15 y 20 minutos. Tras entrar, los niños pueden dar una vuelta por el parque, esto es lo que normalmente les aconsejamos que hagan con sus padres para ver qué les gustaría hacer. Eligen en qué actividades quieren participar, dónde quieren ir y, normalmente, muchos de ellos están muy contentos de trabajar porque están orgullosos de que se les pague.
Ana-Maria Pascaru nos detalló acerca de las preferencias de los niños mayores: Los mayores, es decir, los que tienen entre 11 y 14 años, optan por actividades más divertidas o que les resultan más interesantes. La Academia de Aviación es una zona muy popular entre los niños mayores porque tenemos dos simuladores de vuelo que son reales y donde les gusta jugar. Es una zona muy popular para los niños mayores, igual que la zona del hospital o la del simulador de Fórmula 1.
Nos enteramos asimismo de que la mayoría de los guías del parque hablan inglés, pero muchos de ellos también hablan ruso y francés, por lo que el parque atiende a niños de todas lasnacionalidades.
Versión en español: Victoria Sepciu