Sabor a fiesta #yomequedoencasa
¿Recuerdan los tiempos en que la cercanía de la Pascua era una oportunidad para planear experiencias cada una más sabrosa que otra? Desde la celebración de las fiestas según las antiguas costumbres, en alguna aldea aislada, hasta la inscripción en los programas que incluían muestras culinarias en lugares exóticos, en un castillo o en la playa, y muchas cosas más. Pero como nosotros queremos creer que las fiestas pueden tener el sabor que recordamos dondequiera que las celebremos, les proponemos un viaje culinario por la gastronomía típica de varias zonas del país.
România Internațional, 21.04.2020, 17:27
¿Recuerdan los tiempos en que la cercanía de la Pascua era una oportunidad para planear experiencias cada una más sabrosa que otra? Desde la celebración de las fiestas según las antiguas costumbres, en alguna aldea aislada, hasta la inscripción en los programas que incluían muestras culinarias en lugares exóticos, en un castillo o en la playa, y muchas cosas más. Pero como nosotros queremos creer que las fiestas pueden tener el sabor que recordamos dondequiera que las celebremos, les proponemos un viaje culinario por la gastronomía típica de varias zonas del país.
Si les hubiera gustado celebrar la Pascua en Bucovina, pueden intentar pintar huevos, buscando modelos típicos y símbolos de la Pascua. Es una actividad en la que pueden participar tanto las mujeres como los hombres, según ha afirmado Elvira Romaniuc, recién jubilada de Gura Humorului, exdirectora del Museo de las Costumbres de Bucovina, filial de aquí.
“Los huevos pintados representan uno de los oficios que se han mantenido en esta zona, y no especialmente en Gura Humorului, sino en Bucovina. Huevos pintados porque intentamos hacer que los artesanos descubran y entiendan el significado de los símbolos de los huevos de Pascua, de aquellos que son reales, como decimos. En Bucovina, los hombres también pintan los huevos, y las mujeres no deben crear sólo lo que consideramos que es tradicional.
En Rumanía, durante las fiestas de Pascua, los más conocidos son los menús basados en carne de cordero. Cordero relleno, estofado de cordero (cordero cocido con mucha cebolla y ajo verde), cordero con espinacas. El cozonac y la pască (postres típicos rumano) no pueden faltar del menú típico. Mirela Maria Nechita de Dolheşti, presidenta de la Asociación para la Promoción del Valle de Şomuz, ha hablado también de los sabores de Bucovina y de los platos típcos de Pascua.
“La comida tradicional incluye platos de cordero, asado, sopa, todo lo que hay en casi todas partes. Podemos hacer cozonac, pască con queso y pască con crema. Tenemos una receta especial: mi abuela preparaba la pasca con queso y tocino ahumado cortado en trozos pequeños. Mezclaba el queso de vaca con un poco de queso picante, estiraba la pasta de este pastel típico denominado «pască» y añadía los pequeños trozos de tocino ahumado.
Cambiamos la zona y los sabores con la ayuda del chef Mircea Iovan, quien ha hecho también un viaje culinario por todo el país:
“En la zona de Ardeal, un poco antes de llegar a Săvârşin, encontré un asado de cordero denominado «asado de los pastores». Pregunté en qué consistía: era una pierna de cordero horneada durante la noche, cortada por la mañana, cuando se apagaba el horno. La cortaban y añadían queso fresco. Como la llegada de la Pascua significa usar productos nuevos, ellos también usaban cuajada fresca, de oveja, mucha cebolla y mantequilla, todo esto de aquella zona. Lo llaman «asado de los pastores» y lo comen el día de Pascua, con un pan trenzado y redondo llamado «colac», todo esto consagrado en la iglesia. Es muy interesante que en la misma zona encontré una «pască» con manzanas y crema. ¡Maravillosa!
El estufado de cordero es otro plato importante durante este período y se prepara casi de la misma manera en todas las zonas, al igual que otro plato llamado sarmale, según ha afirmado Mircea Iovan. Pero nuestro interlocutor ha afirmado también que normalmente difieren las especies usadas, dependiendo de cada zona: en Oltenia se usa tomillo y mucho ajo, en Moldavia se usa mejorana, en el Banato se usa albahaca, y en Moldavia Nueva, al lado del Danubio, se usan también higos para preparar algunos platos.
Mircea Iovan ha hablado también de otros platos:
“No falta el pastel de carne (drob, en rumano) que se prepara con órganos de cordero. En algunas zonas como la de Moldavia, hay un plato denominado «cighir» (una mezcla de órganos de cerdo, con verdura, mucha cebolla, preparada con huevos y horneada al igual que el pastel de carne de cordero). Todos estos platos se preparan casi de la misma manera en todas partes, con ciertas influencias. En la zona del Banato hay otro plato muy bueno denominado «sarmale en hojas de parra» que se prepara con una mezcla de carne de cerdo y vaca. Otro plato típico es el asado de cordero del Banato (un asado relleno de intestinos de cordero, 2 o 3 cebollas, 2 o 3 huevos, verdura, medio pan mojado en agua y exprimido, y mantequilla para freír. A esto se añade sal, pimienta y vino dulce, blanco o rojo). Allí se come también sopa de cordero, que es un símbolo de la primavera.
La sopa es un símbolo de la primavera porque se usa mucha verdura de esta temporada y también porque es una sopa pesada, que ya no se puede comer cuando suben las temperaturas. Mircea Iovan ha continuado:
“En la zona de Dobrogea vi un plato impresionante, hecho de pequeños jarretes de cordero. Es un plato denominado «iahnie». Allí hay una influencia turca. Esto se prepara con mucha cebolla, mantequilla y jarretes que se dejan reposar y son espectaculares. Por supuesto, condimentados con hojas de laurel, sal y pimienta, pero son maravillosas.
Durante este período, sólo nos queda hacer un viaje culinario desde casa.
Versión española: Monica Tarău