Bucarest en patinete eléctrico
El pasado mes de septiembre, el líder mundial en micromovilidad, anunció que sus usuarios habían superado los 100 millones de viajes, un estreno mundial para dicha plataforma tecnológica. Este resultado es impresionante ya que en abril de 2019 eran tan solo 50 millones de viajes. Los patinetes eléctricos alquilados a través de una de aplicación móvil ya forman parte de la vida en las ciudades de toda Europa, desde París hasta Berlín, y ahora también están presentes en Bucarest.
Ana-Maria Cononovici, 08.10.2019, 17:51
El pasado mes de septiembre, el líder mundial en micromovilidad, anunció que sus usuarios habían superado los 100 millones de viajes, un estreno mundial para dicha plataforma tecnológica. Este resultado es impresionante ya que en abril de 2019 eran tan solo 50 millones de viajes. Los patinetes eléctricos alquilados a través de una de aplicación móvil ya forman parte de la vida en las ciudades de toda Europa, desde París hasta Berlín, y ahora también están presentes en Bucarest.
Luca Mateescu, gerente de Operaciones de esta plataforma de micromovilidad nos ha dicho de dónde ha surgido esta idea:
“El proyecto fue lanzado en 2017, en San Francisco, por los fundadores Toby Sun y Brad Bao, quienes pensaron en un método destinado a revolucionar el transporte urbano y se les ocurrió este concepto de micromovilidad. Tenemos muchos productos, pero nuestros productos principales son los patinetes eléctricos, que se ven cada vez más en las ciudades rumanas. Fue una iniciativa exitosa en las más de 120 ciudades donde se lanzaron, por lo que claramente esta industria se está desarrollando y la micromovilidad es una solución viable al problema del tráfico urbano y, como todos sabemos, Bucarest tiene un problema masivo con el tráfico. De alguna manera podemos decir que es una buena iniciativa.
Luca Mateescu también ha dado más detalles sobre el sistema de alquiler de patinetes eléctricos en Bucarest:
“Ofrecemos un servicio dockless (sin anclaje), que permite dejar el patinete en cualquier lugar, sin puntos establecidos. Nuestra aplicación se descarga en iOS o Android, y lo único que tiene que hacer el usuario es abrir la aplicación, darse de alta y desbloquear el patinete. Escanea el código del patinete y luego simplemente presiona un botón y el patinete se pone en marcha. Llega a una velocidad máxima de 24 kilómetros por hora. Los usuarios deben ser mayores de 18 años. Es un medio de transporte muy simple y llegas de manera práctica y ecológica a tu destino.
Tal vez se pregunten qué normas de tráfico se aplican a un patinete de este tipo. Luca Mateescu:
“Tenemos un estándar internacional que recomendamos. Básicamente son casi las mismas normas establecidas para los ciclistas. Recomendamos ir por el lado derecho de la carretera, es obligatorio seguir las normas básicas de tráfico. Nosotros recomendamos que dejen los patinetes aparcados en la acera de tal forma que no incomoden a los peatones. Y otro aspecto importante que recomendamos insistentemente es llevar casco. Es un medio de transporte bastante seguro, porque es lento y si los usuarios son cautelosos, el número de accidentes puede ser muy bajo. Las estadísticas dicen que es un medio de transporte muy seguro, pero es muy importante respetar las normas básicas de tráfico y de comportamiento en la circulación. Dentro de poco abriremos unos cursos sobre estos temas, tenemos todo tipo de iniciativas con respecto al comportamiento en la circulación, en el que distribuimos cascos y además, cuando un usuario se registra en nuestra aplicación, se le explica exactamente cuál es el comportamiento correcto, a través de mensajes interactivos que le explican lo que significa el uso correcto de tales medios de transporte.
Las estadísticas muestran que uno de cada cuatro viajes en patinete reemplaza un viaje en automóvil y que los usuarios de este medio de transporte han evitado más de 40 millones de kilómetros en coche. Luca Mateescu:
“Circular en patinete eléctrico es una tendencia en alza en Bucarest. Cientos de miles de bucarestinos se han dado de alta en nuestra plataforma y de sus declaraciones resulta que 150.000 viajes en patinete han sustituido otros tantos viajes en coche. Lo cual es extraordinario para Bucarest.
Y debido a que es una empresa internacional, opera sobre la base de las buenas prácticas observadas en cualquier parte del mundo, lo cual es una clara ventaja, como nos ha dicho Luca Mateescu:
“Intercambiamos buenas prácticas entre países. Una vez que una buena práctica se consolida en algún lugar, la aplicamos globalmente. De alguna manera aprovechamos esto y tenemos la posibilidad de aplicar a nuestro mercado todas las novedades. Por supuesto, en Rumanía es una empresa rumana. ¿Por qué? Porque la idea es adaptarse al mercado rumano, pero utilizamos el grupo de soporte internacional, a nivel de tecnológico, a nivel de las pruebas que realizamos o de otras características. Cuando algo funciona bien, lo aplicamos también en Bucarest.
¿Hacia dónde nos dirigimos?
“Es un proceso de aprendizaje, se trata de una industria nueva y la gente todavía es cautelosa. Todos los participantes en el tráfico deben acostumbrarse y aprender un determinado tipo de comportamiento. Me refiero en principal a los conductores de automóviles ya que para ellos también es una novedad. Bucarest, como saben, no tiene una infraestructura completa para ciclistas, que normalmente usaríamos nosotros también, por lo cual los usuarios de patinetes, los ciclistas y los conductores participan en las mismas condiciones de tráfico. Es por eso que recomendamos que tanto los conductores como nuestros usuarios sean extremadamente cautelosos. Del mismo modo, llamamos la atención sobre cómo estacionar, pero la gente aprenderá poco a poco cómo manejar el estacionamiento de un scooter, especialmente porque queremos ser flexibles y permitimos que nuestros usuarios se estacionen con bastante libertad. Notamos mejoras en estos aspectos de un día a otro, tanto en lo que se refiere al uso de los patinetes como al uso de nuestra aplicación. Lo que hace tres meses era una novedad absoluta, hoy en día todo el mundo sabe qué es lo que tiene que hacer para montar en uno de nuestros patinetes. Es una industria en evolución.
Se trata de una nueva cultura de micromovilidad, de una nueva opción para viajar por la ciudad de una manera agradable, sostenible y segura.