La ruta del vino, en la provincia de Prahova
Son muy pocos los que no disfrutan el vino, pero ¿cuánto sabemos sobre este arte y cuantos nos acercamos al turismo vitícola? Silvia Palaşcă nos habla de las bodegas de la provincia de Prahova.
Daniel Onea, 01.12.2022, 13:11
Nuestro destino de hoy, desde el sur de Rumanía, está dedicado a aquellos a los que les guste degustar un buen vino y, sobre todo, vivir una nueva experiencia. Silvia Palaşcă, responsable de comunicación dentro de la Asociación Dealu Mare, nos cuenta sobre las bodegas de la provincia de Prahova. Así, averiguamos cuáles son los vinos propios, cómo transcurre una visita a la bodega y también cuál es el calendario de eventos para los turistas. Estos pueden iniciarse en el arte y la técnica de la cata de vinos, y en el recorrido por las bodegas pueden escuchar la historia de los vinos. Al final del tour, los visitantes de las bodegas pueden pasar por la tienda de exposiciones, que está a su disposición con souvenirs en estado líquido. Silvia Palașcă, responsable de comunicación dentro de la Asociación Dealu Mare.
«El turismo vitícola, junto con el turismo de montaña, es uno de los puntos clave del turismo en la provincia de Prahova y también en Buzău, porque Dealu Mare se extiende por dos provincias. Desafortunadamente, las bodegas son poco conocidas como destinos turísticos tanto para locales como para extranjeros, pero queremos cambiar esto con el tiempo. Recomendamos venir con un viaje organizado ya sea a través de una agencia de viajes, o a través de los eventos que desde la Asociación Dealu Mare organizamos mensualmente. Organizamos el “Sábado de botellas abiertas” y cualquiera puede participar, pero con su propio transporte. También es posible participar anualmente en el evento «Evasión en Dealu Mare», organizado este año entre el 22 y 23 de octubre, donde también ofrecemos transporte desde Bucarest en autocar, para que la gente pueda disfrutar de la experiencia del vino sin preocuparse del coche».
Pero, ¿cómo es una visita a la bodega? Silvia Palașcă.
«Por lo general, en cada bodega comenzamos con una presentación de la historia de la bodega, la historia del lugar, visitamos los espacios de producción y almacenamiento, es decir, la sala de barricas o la sala de tanques y luego pasamos a la sala de cata. Cada bodega ofrece degustaciones de normalmente entre cuatro y cinco vinos propios de esa bodega. En la cata, también tenemos ediciones limitadas o vinos más especiales, para que la gente pueda experimentar también algo diferente a lo que normalmente puede encontrar en las tiendas o en los restaurantes. La región vinícola de Dealu Mare es conocida por sus vinos tintos. Encontramos muchos vinos de variedades como Fetească Neagră, Cabernet-Sauvignon, Merlot, aunque últimamente también hemos tenido buenos resultados con los de variedades blancas: Chardonnay Baricat, Fetească Albă, Tămăioasă Românească, para los que prefieren vinos más aromáticos».
Muchos turistas prefieren experiencias lo más diversas posible. Por eso optan por combinar el enoturismo con otras formas de turismo. Le preguntamos a Silvia Palașcă, responsable de comunicación dentro de la Asociación Dealu Mare, si podemos hacer esto en la zona.
«En Dealu Mare hay varias opciones de alojamiento, no necesariamente en casas de turismo rural, sino en hoteles más elegantes, de estilo boutique. Sin embargo, aquellos que quieran tener una experiencia de agroturismo pueden ir a la zona donde están los productores locales de miel y queso. Se pueden organizar también tours para conocer las tradiciones locales, que aún se mantienen vivas gracias a algunos productores pequeños. Por ejemplo, nosotros estamos asociados con productores de queso, de lavanda, de miel y con un centro de equitación. Además, el ciclismo es muy popular en Dealu Mare. Estamos asociados con varios proveedores de este tipo de servicios. Pueden hacer un tour en bicicleta y conocer mejor las bodegas, y tener una experiencia en la naturaleza».
El otoño es, sobre todo, la estación en la que los viñedos son los protagonistas de la temporada. ¿Qué sucede, sin embargo, si solo podemos programar nuestra visita a las bodegas en invierno? Silvia Palașcă.
«También hemos celebrado el evento «Sábado de botellas abiertas» en invierno. En invierno tratamos de crear un ambiente más agradable, con calor, alrededor de la chimenea. En algunas bodegas también podemos ofrecer otras formas de pasar el tiempo libre, por lo que la visita a la bodega se puede realizar en cualquier época del año. Encontramos soluciones y cosas que hacer en cada temporada, así que no, las bodegas no cierran. Las hemos tenido cerradas ahora, en otoño, durante el período de vendimia, porque es un período muy movido, y la mayoría tampoco tenía tiempo para los turistas. Pero a partir de ahora, en octubre, acaba la vendimia y volvemos a abrir.
En ediciones anteriores del evento «Evasión en Dealu Mare», también hemos tenido turistas extranjeros que habían visitado previamente el valle de Napa o la Toscana. Dijeron que habían tenido una experiencia similar aquí, pero que estaban un poco decepcionados por la infraestructura que hay en la provincia. Entonces, deberían hacerse inversiones en la infraestructura local, para que tengamos una experiencia al mismo nivel que las internacionales. Pero en cuanto a las bodegas, la calidad del vino y la calidad de la información que recibieron, quedaron muy satisfechos».
El enoturismo está creciendo en Rumanía, dice Silvia Palașcă, responsable de comunicación dentro de la Asociación Dealu Mare.
«En la primera edición de “Evasión en Dealu Mare”, tuvimos 300 personas, el año pasado 500, este año esperamos aún más, así que queremos crecer. Algunas bodegas ya han hecho inversiones en espacios de alojamiento, hemos visto que se están desarrollando nuevos hoteles y nuevos restaurantes en la zona. Por lo tanto, es un tipo de turismo en crecimiento y hemos visto mucho interés por parte de los jóvenes, que quieren más experiencias nuevas. Tenemos 5 rutas y 15 bodegas, así que, aunque ya hayas estado antes, seguramente encontrarás algo interesante para ver este año, e invito a todos a que vengan. Si ahora no es posible, siempre estamos a disposición para encontrar una solución para que puedas visitar las bodegas, para que puedas conectar directamente con los enólogos y con las personas que están detrás del vino, conocer su historia y quedarte en nuestra casa”.
En los últimos años, además de la promoción de las variedades de vino rumano, ha tenido éxito una asociación con productos locales. Así, si entras en una bodega, además de los vinos, también descubrirás parte del sabor de los platos tradicionales rumanos.
Traducción al español: Caroline Hernado Carrera