El Parque Natural de Apuseni
Situados en Transilvania, al oeste de Rumanía, los montes Apuseni no se distinguen necesariamente por su altitud, sino por las múltiples posibilidades que ofrecen para pasar el tiempo libre.
Daniel Onea, 05.08.2021, 17:19
Situados en Transilvania, al oeste de Rumanía, los montes Apuseni no se distinguen necesariamente por su altitud, sino por las múltiples posibilidades que ofrecen para pasar el tiempo libre. Aquí, la belleza y la rareza de los fenómenos kársticos, algunos únicos en Europa, llevaron a la creación de un área protegida de 76 000 hectáreas: el parque natural de Apuseni. Alin Moș, director de la administración de este parque, nos manda una invitación que es difícil de rechazar:
«Es una zona accesible, ya que las alturas no son considerables. Los picos más altos alcanzan aquí algo más de 1800 metros. Hay zonas de meseta, sin grandes diferencias de relieve, y en aquellos lugares donde las hay, no son tan complejas como para que el turista necesite una forma física particular. El Parque Natural de Apuseni es un lugar muy atractivo ya desde comienzos del siglo XIX. A lo largo del tiempo se han puesto en marcha numerosos programas de visitas. A principios del siglo XX se instalaron las primeras plataformas turísticas, sobre todo en lugares donde se organizaban ciertas rutas de visita con escaleras y barandillas. Los primeros balcones, en los miradores, se crearon hace más de cien años. En aquel momento, el Parque Natural de Apuseni era menos accesible para el público en general, era salvaje y poco alterado por la civilización. Hoy en día, nuestro parque, en su parte central, sigue conservando una región tan atractiva como entonces, justamente porque no ha sufrido modificaciones derivadas de la actividad humana.»
Es el tercer parque de Rumanía en cuanto a extensión, nos sigue contando Alin Moș, director de la administración del Parque Natural de Apuseni:
«Se trata de un parque natural, precisamente, porque en su territorio protegemos y preservamos lo que significa la interacción a largo plazo entre el hombre y la naturaleza. Esto significa que, en el territorio del parque, contamos con numerosas comunidades humanas, y si nos fijamos en el número de habitantes, más de 10 000 personas viven en el territorio del parque, en tres provincias: Bihor, Cluj y Alba. Gran parte de la extensión del Parque Nacional de Apuseni se incluye en la región histórica de Țara Moților. Se trata principalmente de la cuenca del valle de Arieș. Desde este punto de vista, la cultura y las tradiciones locales son el principal atractivo de esta zona para los turistas.»
El karst es la principal atracción del parque. Se trata de la zona de piedra caliza en que se forman cuevas, dolinas o gargantas. Como destino de importancia internacional, debemos comenzar por el glaciar de Scărișoara. Lo cuenta Alin Moș:
«Goza de fama internacional, sobre todo desde 2009, cuando, tras algunos estudios, se volvió a medir el volumen del bloque de hielo, y hoy es, sin duda, el mayor bloque de hielo subterráneo del mundo, con más de 130 000 metros cúbicos de hielo. También es uno de los más antiguos de Europa, con más de 4000 años. Por eso, hoy en día, el glaciar de Scărișoara, el paisaje particularmente pintoresco que lo rodea, la belleza del subsuelo, con el bloque de hielo y las estalagmitas y estalactitas formadas por hielo, debido a la temperatura de la zona, crean un atractivo inigualable para los visitantes. Asimismo, a partir de 2021, se renovará la primera parte del acceso al glaciar de Scărișoara, de modo que, ya en la nueva temporada turística, el acceso se hará siguiendo normas de seguridad mejoradas y con mucha más comodidad.»
Las fortalezas de Ponor (Cetățile Ponorului en rumano) constituyen otro atractivo turístico de suma importancia en la zona del parque, un emblema de la zona kárstica de los Apuseni. Lo cuenta Alin Moș, director de la administración del Parque Natural de Apuseni:
«Se trata de un fenómeno kárstico de una magnitud sustancial. Básicamente, es una zona que, en superficie, reúne tres dolinas. Estas son depresiones en la corteza terrestre, en la roca de esa zona. Las tres dolinas, en su conjunto, tienen un diámetro de un kilómetro, por lo que también son impresionantes por su tamaño. La cueva que se abre desde el centro de estas dolinas tiene una entrada de más de 70 metros de altura. Básicamente, pueden imaginarse dos catedrales superpuestas, una encima de otra. Lo primero que fascina a los turistas es tal grandiosidad en una zona kárstica boscosa, rodeada de bosques de abetos, libres de explotación humana, sin que se haya modificado su estructura natural. El paisaje en sí y la grandeza del lugar te dejan con la sensación de haber visto algo fantástico, un lugar que pocos tienen la oportunidad de visitar.»
En el Parque Natural de Apuseni se encuentran actualmente más de 1500 cuevas. Muchas son líderes por su longitud. Hasta hace poco, una de ellas era la cueva más profunda de Rumanía. Hoy en día, solo la supera una cueva del macizo de Piatra Craiului. Muchas están cerradas al público, aunque hay otras que acogen a visitantes. Entre ellas, se encuentra la famosa Cueva de los Osos. Actualmente, dispone de una de las infraestructuras turísticas más desarrolladas de Rumanía, con hasta 100 000 visitantes anuales. La mayoría de los que vienen a visitar el parque lo hacen por sus paisajes extraordinarios, aunque también para visitar estas cuevas, que presentan una gran diversidad y variedad de formas y colores, comenta Alin Moş, director de la administración del Parque Natural de Apuseni Natural:
«La administración de un parque natural tiene como objetivo desarrollar constantemente experiencias turísticas nuevas. Por la trayectoria, por todos los actores interesados en incrementar la oferta del destino turístico Parque Natural de Apuseni, en 2009, la Comisión Europea nos otorgó el título de Destino Europeo de Excelencia, es decir, EDEN. Posteriormente, hemos participado en varios proyectos destinados a apoyar tanto a las comunidades como a los emprendedores locales en el desarrollo de negocios respetuosos con la naturaleza, incluidos los del sector turístico: estructuras de alojamiento o productos alimentarios locales. Muchos de ellos han recibido una certificación con el logo del parque. Cuando alguien entra en el territorio del parque o en una tienda de Rumanía y ve la indicación “colaborador del Parque Natural Apuseni, tiene la seguridad de que el riesgo de contaminación con sustancias de ese producto es inexistente. Muchos de ellos se engloban la categoría de productos orgánicos.»
Así, hoy hemos descubierto un destino para toda la familia, ideal para la temporada de verano que se acerca.
Versión en español: Víctor Peña Irles