Fiestas de invierno en las faldas del macizo Piatra Craiului
Si desean pasar las fiestas de invierno lejos del tumulto de las grandes ciudades, en un entorno natural y un ambiente de cuento, tenemos el destino perfecto: el desfiladero de Dâmbovicioara.
România Internațional, 20.12.2018, 14:04
Si desean pasar las fiestas de invierno lejos del tumulto de las grandes ciudades, en un entorno natural y un ambiente de cuento, tenemos el destino perfecto: el desfiladero de Dâmbovicioara (Cheile Dâmbovicioarei). En esta zona hay numerosos lugares turísticos, y las tradiciones y costumbres típicas del invierno harán que su estancia tenga un encanto especial. Raluca Busioc, agente de turismo en el Centro de Información Turística de Dâmbovicioara, distrito de Argeș, ha ofrecido más detalles:
“La villa de Dâmbovicioara está en el limite de los distritos Argeș con Brașov. Es la villa más al norte del distrito de Argeș, y los lugares turísticos más conocidos serían el macizo Piatra Craiului, el desfiladero de Dâmbovicioara y la cueva de Dâmbovicioara. Pero en esta zona hay numerosos otros lugares turísticos. Podemos decir que el lugar más buscado para los paseos es el desfiladero de Dâmbovicioara. Pero la cueva de Dâmbovicioara es también muy buscada.”
En la reserva Piatra Craiului hay aproximadamente 50 cuevas. La cueva de Dâmbovicioara fue descubierta hace 400 años, en 1579, y fue electrificada en 1980. Ahora hay una pasarela de metal, por la cual los turistas pueden recorrer los 250 metros que se pueden visitar en la cueva. Pero hay también otros pasillos cerrados al público. Pero ¿qué es lo que podríamos ver en la parte turística? Raluca Busioc.
“Podríamos ver estalactitas de varias formas. Las personas que tienen mucha imaginación han afirmado que aquellas estalactitas y estalagmitas se parecen a una cabeza de serpiente o una pata de oso, por ejemplo. Una de las leyendas cuenta que en la cueva de Dâmbovicioara vivió un asceta, Pavel, que hizo de las piedras una biblioteca, una cama, etc. Podemos decir que, si dejamos volar nuestra imaginación, podemos identificar varios objetos. Los niños de la villa de Dâmbovicioara hacen voluntariado en la cueva y son guías. Les gusta mucho contar a los turistas la leyenda del asceta Pavel. Ellos cuentan también otra leyenda, de dos forajidos que robaban dinero a los ricos para dárselo a los pobres. Los niños están encantados de ver que a los turistas les gusta escuchar ambas leyendas. Y los turistas están encantados ante esta imagen pura ofrecida por los niños.”
Esta zona es muy adecuada para los paseos, según ha afirmado Raluca Busioc, agente de turismo del Centro de Información Turística de Dâmbovicioara.
“Tenemos recorridos turísticos de baja dificultad, adecuados para la temporada de invierno. Cabe recordar los recorridos hacia la reserva Piatra Craiului o hacia Leaota, muy adecuados para los paseos cortos. Tenemos también un museo tradicional muy bonito, con objetos muy antiguos. Y tenemos también tradiciones. Quisiera recordar la costumbre de Brezaie. Los jóvenes de la aldea forman grupos y van a cantar villancicos en Nochebuena con esta Brezaie, que es una cabra de madera con muchísimos pañuelos colorados procedentes de las jóvenes que no están casadas. Ayudamos a los jóvenes a promover este villancico. El villancico supone también una fiesta de Navidad. Durante la tarde de Navidad se organiza la fiesta de Brezaia. Según la tradición, es sobre todo la reunión de los jóvenes que no están casados, una rueda (“horă”, en rumano, un baile típico) de la aldea, en la que también participan las demás personas de la villa. Estamos trabajando también en otros proyectos para el siguiente periodo. Este mes hemos organizado un acontecimiento para celebrar el Día Nacional de Rumanía, pero habrá también otras sorpresas.”
Raluca Busioc recomienda a los turistas que practiquen un turismo organizado en la zona de Dâmbovicioara. Así pueden llegar a todos los lugares turísticos de esta zona y pueden obtener todas la información sobre estos lugares. Esto es lo que recomienda a todos aquellos que visitan el Centro de Información y Promoción Turística de Dâmbovicioara.
“Tenemos libros con información sobre Dâmbovicioara, Rucăr y Lerești, las tres villas turísticas de esta región. Pero en nuestra opinión, lo más importante es visitar la página web. Allí los turistas pueden encontrar también mi número de teléfono. Es bueno que estén informados antes de venir a Dâmbovicioara. Por supuesto, también les espero en el Centro turístico, donde tengo algunos objetos tradicionales, una habitación tradicional, para conocer un poco nuestra cultura. Asimismo, les puedo dirigir hacia los recorridos accesibles en cualquier temporada del año.”
La mayoría de los turistas son extranjeros, según ha afirmado la agente de turismo Raluca Busioc.
“Vienen de Israel, Francia, Canadá o Estados Unidos. Vienen de muchísimos países, sobre todo de Europa. Están encantados con lo que encuentran aquí, sobre todo los de Israel, donde se sabe que no hay tanta vegetación como aquí. Nuestra villa es ideal en este aspecto, porque tenemos muchísimas áreas verdes, bosques, montañas y aguas que impresionan. Invito a todos que vengan a Dâmbovicioara y abran su alma para conocernos, porque Dâmbovicioara es una villa pequeña y sencilla, pero con personas acogedoras que quieren enseñar a nuestros visitantes lo mejor y más lindo que tenemos: comida típica, tranquilidad, las comodidades necesarias para tener una estancia agradable. Es decir que tenemos todas las ventajas.”
Los hostales de Dâmbovicioara están ya preparados para recibir a sus huéspedes durante las fiestas de invierno. Ya sea que elijan alquilar todo el hostal o solamente una habitación, los precios son ventajosos. Por ejemplo, pueden encontrar una cabaña de 16 plazas que se puede alquilar por 1380 lei (300 euros) por noche. El alojamiento es sin comida. También tendrán jardín con asador y terraza. Además, en toda la propiedad hay conexión WiFi gratuita.