El otoño en el valle de Prahova
Hoy viajamos al valle de Prahova, el destino favorito para los aficionados a la montaña.
Daniel Onea, 25.10.2018, 05:00
Hoy viajamos al valle de Prahova, el destino favorito para los aficionados a la montaña. Pero la zona también es conocida por sus balnearios, los destinos idóneos en cualquier estación del año y por sus importantes monumentos históricos, los monumentos naturales y los viñedos. Nuestra guía de hoy es Anda Popa, secretaria general de la Asociación para la Promoción y el Desarrollo del Turismo de Prahova, y nos invita a visitar Prahova en otoño.
Primero, Anda Popa nos anima a hacer un alto en el balneario de Sinaia, La perla de los Cárpatos, como también es conocido, ubicado a unos 120 kilómetros al norte de Bucarest en las orillas del río Prahova, en las faldas de los montes Bucegi.
Queremos promover nuestro distrito en el ámbito internacional bajo el lema «Prahova, your royal holiday». Quisiera mencionar el castillo de Peleș, que figura entre los diez más hermosos castillos del mundo, según señaló el rotativo francés Le Figaro. Peles fue la residencia de los reyes de Rumanía en los siglos XIX – XX. Cuenta con guías que hablan inglés, francés y ruso, entre otros. Solo hay que pedir una visita guiada cuando se compra la entrada. El castillo se puede visitar durante todo el año, salvo el mes de noviembre cuando está cerrado para la limpieza.
Cerca de Peleș hay otro castillo pequeño, el Pelișor, cuya arquitectura conserva el estilo del Renacimiento alemán. Tiene torres cubiertas de placas de arcilla de varios colores y 70 habitaciones cuya decoración incluye piezas originales, así como copias destinadas a recrear la atmósfera de la época de los 1900. Continuamos nuestra visita con un monumento natural.
Les recomendamos la Esfinge, el centro energético de los montes Cárpatos. Muchos turistas quieren verla para sentir la energía de los montes Bucegi. La Esfinge de Rumanía tiene la misma altitud que la de Egipto, de 8 metros, y se parece a la estatua de Venus, descubierta en Italia. Se trata de una formación rocosa natural, sin ninguna intervención humana, que tomó su forma actual hace varios cientos o miles de años. Se puede llegar ahí desde el balneario de Bucegi o desde Sinaia, si optamos por la ruta Transbai. En este caso tendremos que ir en coche y luego caminar algunos kilómetros.
Anda Popa, secretaria general de la Asociación para la Promoción y el Desarrollo del Turismo de Prahova, ha dicho que si llegamos a las montañas no deberíamos perdernos la visita a la Cruz de Caraiman, construida como homenaje a los héroes caídos en la guerra e inaugurada el 14 de septiembre de 1928.
En 2014, fue inscrita en el Libro de los Récords. La Cruz de los Héroes se encuentra en el pico de Caraiman a una altura de 2.291 metros. La cruz tiene una altura de 28 metros y se puede ver en los días serenos, desde Bușteni. El monumento es la cruz en una cumbre más alta del mundo y ofrece un paisaje espectacular.
El Festival del Vino, que este año se organiza en la última semana de septiembre, cuenta con una tradición de 20 años. En el valle de Prahova, podrán probar el embajador de los vinos rumanos, el Feteasca Neagră, y también visitar las bodegas. Hay algunos museos temáticos ubicados en la Ruta del Vino, según ha dicho Anda Popa.
La Ruta del Vino se puede recorrer durante todo el año. Esperamos a los turistas en otoño cuando podrán hacer degustaciones de vino y de mosto. Pero también invitamos a los turistas en junio, cuando florece la vid y sus flores tienen un perfume especial. Un lugar que yo recomiendo es la zona de Dealul Mare, que se parece a la región de Burdelas en Francia. Esta ruta está destinada a los aficionados al vino o a los que quieran conocer sus secretos. A través de este programa turístico, les ofrecemos una visita al viñedo, a la bodega, para conocer como se hace el vino. Los turistas pueden participar en una cata, donde disfrutarán de 4 o 5 tipos distintos de vino, en función de la bodega que quieran visitar. Además, podrán conocer un poco de la historia del vino rumano tal como se hacía antaño. Hay una bodega donde se pueden ver los utensilios con los que se fabricaba el vino en nuestra zona. En la ruta también hay una mansión muy bella típica de la historia del lugar. En esta ruta figuran muchos puntos de interés donde los turistas podrán enterarse de cosas inéditas y también relajarse.
Nuestro último destino en el valle de Prahova es la Salina Slănic. Anda Popa, secretaria general de la Asociación para la Promoción y el Desarrollo del Turismo de Prahova.
Se trata de la salina más grande de Europa. Su superficie abarca más de 78.000 metros cuadrados y 14 habitaciones. Algunas alcanzan unos 50 metros de altitud. La salina tiene la ventaja de poder recibir a los turistas durante todo el año incluso cuando hace mal tiempo. Está ubicada a menos de 100 kilómetros de Bucarest, por lo tanto esperamos a todos los turistas no solo a los que se alojan en el valle de Prahova. Aparte de esto podrán probar los productos locales. En el valle de Doftana, los turistas encontrarán el famoso queso llamado cașcavea. Se trata de un producto típico de esta zona donde también tiene lugar un festival que lleva su nombre, el Festival de Cașcavelei, celebrado cada mes de septiembre. La edición de este año tuvo lugar a principios del mes. Les invitamos a probar este producto y también el queso de burduf, de fuerte sabor y textura suave, un embutido llamado pastrama de oaie, la țuica, que es el aguardiente típico rumano hecho de ciruelas y por supuesto, el vino.
En la página visitprahova.ro encontrarán más información útil sobre el valle de Prahova y los principales objetivos de la zona. Así podrán disfrutar de una estancia muy agradable en el distrito de Prahova.