La OTAN y la amenaza terrorista
Debido a la intensificación de los atentados, los líderes de la OTAN han declarado que la Alianza del Atlántico Norte permanece unida ante el terrorismo bajo cualquier forma y responderá de manera coordinada a las amenzas contra los Estados aliados.
Corina Cristea, 11.08.2017, 15:07
Debido a la intensificación de los atentados, los líderes de la OTAN han declarado que la Alianza del Atlántico Norte permanece unida ante el terrorismo bajo cualquier forma y responderá de manera coordinada a las amenzas contra los Estados aliados. El secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, ha anunciado que la OTAN se sumará a la coalición contra la organización Estado Islámico y creará una estructura de información sobre el terrorismo. Al mismo tiempo, se ha decidido designar un coordinador para los esfuerzos de la Alianza contra el terrorismo.
¿Cómo pueden ser interpretadas estas decisiones? El catedrático Iulian Chifu, presidente del Centro de Prevención de los Conflictos nos explica:
“Europa se ha enfrentado en los últimos años a los efectos de esta acción terrorista y es verdad que en gran medida existe ya el principio del terrorismo del interior, pero en igual medida existen aquellas zonas controladas por las organizaciones terroristas DAESH, Estado Islámico en Siria e Irak que favorecen el desplazamiento de los combatientes extranjeros y su preparación. Es un azote que nos amenza a todos.
La Alianza del Atlántico Norte del futuro debe centrar más su atención en el terrorismo y la inmigración, así como en la amenaza de Rusia contra nuestras fronteras orientales y del sur, según declara el nuevo líder de Casa Blanca. Por estas razones, ha añadido Donald Trump, he sido muy directo con el secretario general de la OTAN y con los miembros de la Alianza del Atlántico Norte y les he dicho que los países de la OTAN deben contribuir económicamente y respetar sus compromisos. Es decir, asignar un 2% del PIB para la Defensa.
Invitado a Radio Rumanía, el analista militar Alexandru Grumaz ha estimado que hay tres asuntos que los aliados deben analizar con el presidente estadounidense:
“Los países aliados deben participar en este esfuerzo financiero que se hace en la Alianza, compartir este esfuerzo para la Alianza y para su propio interés concediendo un 2% del PIB para la Defensa de dicho país. Los tres grandes asuntos que hay que debatir en el presente son: compartir las obligaciones financieras y los gastos para la Defensa de cada Estado, los compromisos que Donald Trump asumirá con respecto a la seguridad europea y el papel de la OTAN en el esfuerzo antiterrorista.
Los problemas a debatir en las condiciones en que todos los aliados opinan lo mismoes lo que ha expresado el secretario general de la Alianza Noratlántica, Jens Stoltenberg. “La OTAN representa más que un tratado, es más que una organización. La OTAN encarna la relación única entre Europa y EE. UU.
El analista político Iulian Chifu pasa revista a los compromisos en el ámbito de la Alianza, compromisos que persiguen tres direcciones.
“En primer lugar, a nivel financiero, la asignación de un 2% del PIB. Además, hasta el final de este año, cada Estado miembro deberá presentar su propio calendario de compromisos para alcanzar el objetivo. Ya desde la cumbre de la OTAN del País de Gales, de 2014, continuada el año pasado con la Cumbre de Varsovia, este compromiso fue asumido por unanimidad por todos los aliados. El segundo componente financiero subraya que un 20% de esta cantidad de dinero sea asignada a unas capacidades de última generación, a la investigación y el desarrollo en este sector, porque se nota que los países europeos empiezan a perder la capacidad de interoperar con EE. UU. La Alianza ha constantado más de una vez el hecho de que son necesarias determinadas capacidades para poder defenderse juntos. En consecuencia, las inversiones irán hacia los sectores deficitarios de un aliado u otro, en toda la Alianza. El tercer componente se refiere a los compromisos para las misiones de la OTAN
¿Logrará la Alianza Noratlántica ultimar todos estos aspectos en un plazo razonable? Contesta Iulian Chifu:
“No cabe duda de que lo hará. Una vez asumidos, firmados los documentos mencionados, éstos son el resultado de las negociaciones y del acuerdo de todos los miembros de la Alianza.
Rumanía desea que la Alianza Noratlántica sea fuerte, y esté unida y cohesionada con un flanco oriental bien equilibrado. La zona del mar Negro debe seguir centrando la atención y la relación transatlántica se debe reforzar. Con respecto a Rusia, hace falta un enfoque unitario. Esta es la posición de Bucarest, expresada por el jefe del Estado Klaus Johannis.