Prioridades para los rumanos del extranjero
Conservar, desarrollar y afirmar la identidad étnica, lingüística, cultural y religiosa de los rumanos del extranjero son objetivos estratégicos de la política exterior rumana, declaran las autoridades de Bucarest.
Corina Cristea, 02.06.2017, 18:12
Después de 1989, las relaciones con los rumanos del extranjero se han convertido en una preocupación constante de las autoridades de Bucarest en el contexto de la profundización de las relaciones bilaterales con los Estados en que hay comunidades rumanas. Por otra parte, la protección de los derechos de las personas que pertenecen a las minorías nacionales es una de las prioridades permanentes de los gobiernos democráticos y de las instituciones europeas.
Conservar, desarrollar y afirmar la identidad étnica, lingüística, cultural y religiosa de los rumanos del extranjero son objetivos estratégicos de la política exterior rumana, declaran las autoridades de Bucarest. “El nuevo Ministerio para las Relaciones con los Rumanos del Extranjero es una institución sumamente ambiciosa hoy día porque no trabajamos solamente con proyectos realizados por las organizaciones de rumanos del extranjero, sino que procuraremos identificar modalidades para adaptar los programas a los intereses específicos de cada comunidad, anunciaba al principio del año y de su mandato la titular de esta cartera, Andreea Păstârnac.
Todas las comunidades de rumanos están preocupadas por las dificultades a las que se enfrentan en el país en que se encuentran. Son dificultades muy complicadas, muchas veces vitales, si hablamos por ejemplo de los rumanos del Reino Unido que se verán afectados por el brexit, pero hay también temas comunes que unen a los rumanos del extranjero, ha añadido Andreea Păstârnac. Ella aboga a favor del diálogo entre estas comunidades de tal forma que los proyectos exitosos puedan servir de modelo para otras comunidades. Invitada recientemente a los estudios de Radio Rumanía, posos meses después de ocupar el cargo, la ministra Andreea Păstârnac ha pasado revista a los problemas que encara la diáspora rumana.
“Al hablar de los rumanos del extranjero, hablamos de una multitud de temas ya que un tercio de la población activa de Rumanía trabaja en otros países. Lo primero que nos preocupa son los problemas de identidad señalados, los temas relacionados con lo que nos hace sentir rumanos, y naturalmente, con el idioma rumano. También nos preocupa el tema de los derechos de los ciudadanos rumanos residentes en el extranjero, sus derechos laborales. Hay por ejemplo un gran número de rumanos en el Reino Unido quienes a causa del brexit ven en peligro su estatuto social y su estatuto laboral. Hay también otros grupos de rumanos que trabajan en el extranjero que ven amenazados sus derechos. Es una prioridad para nosotros continuar las campañas realizadas junto con otros ministerios: con el Ministerio del Trabajo, el Ministerio de Asuntos Interiores, el Ministerio de Exteriores. Son campañas de información de los ciudadanos rumanos sobre sus derechos. Ellos mismos son los que deben defender sus derechos para que sean respetados por los demás.
El número total de rumanos que viven y trabajan en el extranjero es difícil de cuantificar, pero de los datos recibidos de parte de los Estados miembros de la UE y de los estudios realizados hasta la fecha resulta que se trata de varios millones de personas. La mayoría de ellos han elegido Italia y España como países de destino, y el tercer país preferido por los migrantes rumanos es el Reino Unido. Andreea Păstârnac ha explicado que la educación es el principal problema que quiere solucionar el Ministerio que dirige porque muchos niños rumanos que nacieron en otros países dejan de estudiar rumano.
“Pensamos en apoyar a las asociaciones de voluntarios, las escuelas parroquiales que organizan cursos de rumano. Conviene destacar que son pocos los jóvenes escolarizados sobre todo en España e Italia que aprenden rumano. Procuramos realizar un programa común con el Ministerio de Educación Nacional destinado a facilitar los libro de textos de rumano del primer curso a estas escuelas, tanto en formato clásico como en formato digital. Hay casos en que, por falta de libros los profesores voluntarios reparten hojas fotocopiadas a sus alumnos y este es el único material de apoyo para estudiar rumano. En este programa procuramos ayudar a los voluntarios, ayudar a las escuelas parroquiales y tratar de organizar programas de formación para los voluntarios que dan clases de rumano.
Muchas comunidades de rumanos del extranjero tienen escuelas de fin de semana. Están organizadas cerca de las parroquias cristianas y en el marco de las asociaciones representativas de rumanos del extranjero.
(Traducido por Irina Calin)