Alianzas cívicas para combatir el acoso escolar en la escuela
Para la sensibilización sobre problemas individuales, aunque también para su resolución, el arte siempre ha demostrado ser muy eficaz.
România Internațional, 05.05.2021, 18:25
Para la sensibilización sobre problemas individuales, aunque también para su resolución, el arte siempre ha demostrado ser muy eficaz. Parece ser que, incluso a una escala social o comunitaria más amplia, puede contribuir, al menos, a que los grupos se familiaricen con los problemas de sus miembros y hacer aumentar la empatía. Todo esto se ha demostrado recientemente gracias un proyecto llevado a cabo en una comunidad rural en la provincia de Gorj (suroeste del país) por la asociación Docuart. Daniela Apostol, gestora cultural y directora de Docuart, nos da detalles al respecto:
«Pensamos cuál sería la mejor manera de tratar de resolver un problema que identificamos de naturaleza social utilizando herramientas relacionadas con la cultura y la educación. Básicamente, esto es lo que hemos hecho durante años, por lo que ahora nos hemos propuesto hacer lo que mejor se nos da. Así es como ha nacido el “Proyecto Congruent: competencias necesarias para grupos heterogéneos de jóvenes”. Es un proyecto que consideramos necesario para reducir las disparidades entre los jóvenes gitanos y no gitanos de Europa y que también tiene como objetivo aumentar la inclusión de los grupos vulnerables. Es un proyecto que llevamos a cabo en colaboración con la escuela Antonie Mogoș de un pueblo de la provincia de Gorj. Nos alegró mucho encontrar las puertas abiertas por parte de la dirección de la escuela. El proyecto se propone crear un contexto más favorable para el desarrollo de 200 alumnos y pensamos que podíamos contribuir a este desarrollo creando un vínculo muy importante entre los alumnos, la escuela y los padres.»
El proyecto comenzó en febrero con los padres y los alumnos de cuarto y quinto curso. Así, la primera actividad consistió en un programa de atención parental con el objetivo de familiarizar a los adultos con las necesidades de desarrollo emocional, mental y educativo de los niños, así como para ayudarlos a mejorar su relación con la escuela y la comunidad. Durante las reuniones no se insistió en la parte teórica, sobre todo porque los padres, en general, tenían muchas ganas de comunicar y discutir sus problemas sociales, económicos e incluso parentales, tal y como constató la psicóloga Alexandra Cojocaru:
«Me impresionó mucho el espíritu de cohesión de los padres de cuarto curso. Están muy unidos, reaccionan en conjunto a los problemas de los niños y tienen una estrategia común para resolverlos. La maestra de los niños desempeña un papel muy importante, y es que los padres acudieron cuando ella se lo pidió, con muchas ganas de trabajar con nosotros y muy abiertos a comunicarnos los problemas que tienen a escala individual y familiar. La variedad de problemas es bastante amplia: hay niños que provienen de familias desfavorecidas o que tienen padres divorciados, por ejemplo.»
Los latidos de esta comunidad rural maravillosa se pudieron sentir, ya que, a pesar de la pandemia, las actividades del proyecto no se llevaron a cabo en línea, tal y como sigue contando Daniela Apostol:
«Preferimos las reuniones presenciales. Ahora, durante las vacaciones de primavera y durante toda la pandemia, hemos evitado las reuniones virtuales, ya que este es el tipo de actividad en que las reuniones presenciales son muy importantes. Básicamente, vamos al pueblo de Ceauru, dos o tres veces al mes, donde nos quedamos dos o tres días en cada ocasión y nos reunimos con los padres de cada clase y los estudiantes de cada clase. Contamos con un psicólogo, un director y un mentor, en función de cada actividad. Cada sesión dura entre 45 y 70 minutos según el tema tratado. Intentamos de algún modo aunar la información de la psicología y el arte en la mejor combinación posible, presentada en una fórmula que sea para los padres tan fácil de digerir como sea posible.»
Además del componente de atención parental, el proyecto Congruent también incluye un módulo para combatir la intimidación o el acoso escolar entre los niños, un fenómeno con el que la comunidad de la localidad de Ceauru (Gorj) estaba familiarizada. Lo cuenta Daniela Apostol:
«Los niños conocían muy bien este fenómeno. Incluso les pregunté si podían contarnos una noticia que hubiesen escuchado de casualidad en la tele o si habían presenciado este tipo de escenas. Mi sensación es que, en esta escuela, la comunidad de estudiantes está más unida y esto se debe, en primer lugar, a los padres. Podría decir que, en comparación con el medio urbano, este fenómeno quizás se dé menos en el medio rural. El mayor problema que afrontan cuando hablan de este fenómeno es la falta de credibilidad que tienen ante los adultos cuando hablan de acoso escolar y sufren mucho por ello. A los padres les expliqué que, en los casos de acoso escolar, tanto el agresor como el agredido son víctimas, ya que el agresor se comporta así porque en el pasado también fue víctima de acoso.»
Tras las primeras reuniones, tendrá lugar una evaluación psicológica para detectar casos que necesiten terapia individual. En cuanto a la sensibilización y la lucha contra el acoso escolar a escala grupal, los propulsores del proyecto Congruent han optado por la cineterapia. Se trata de ver películas o secuencias de películas que pueden ayudar, tanto a los niños como a los padres, a comprender mejor lo que sucede con los agredidos, así como con los agresores. Nos cuenta más Alexandra Cojocaru:
«Personalmente, considero que la conexión entre el arte y la psicología es muy importante. La cineterapia proporciona las herramientas necesarias para explorar e identificar nociones que son más difíciles de identificar y tratar en la terapia clásica, sobre todo si esta es de corta duración. En el marco de este proyecto ofrecemos varias sesiones a los niños. No son muchas, pero al complementarlas con sesiones de cineterapia, esperamos alcanzar un resultado que, posiblemente, mediante sesiones convencionales, tomaría mucho tiempo conseguir.»
Asimismo, el teatro o, concretamente, la realización de pequeñas escenas en las que los alumnos asumen determinados roles puede ayudarles a tomar más conciencia de sus problemas y los de los demás. El programa Congruent se llevará a cabo hasta octubre de 2022 y, además de repetirlo en otros pueblos, los iniciadores también pretenden constituir un grupo de acción local que tome las riendas de las actividades concebidas por Docuart y les dé continuación una vez finalice el proyecto.
Versión en español: Víctor Peña Irles