El maravilloso mundo de los manuales escolares
Igual que el célebre personaje del libro Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll, un grupo de investigadores de la Facultad de Sociología de Bucarest ha explorado.... el país de los manuales
Christine Leșcu, 30.09.2015, 16:50
Igual
que el célebre personaje del libro Alicia en el País de las Maravillas de
Lewis Carroll, un grupo de investigadores de la Facultad de Sociología de
Bucarest ha explorado…. el país de los manuales. Del mes de octubre de 2014,
al mes de mayo de 2015, estos realizaron un estudio sobre los manuales
escolares de comunicación en el idioma rumano y de educación cívica desde primero y hasta cuarto grado de enseñanza, pero lo que han
descubierto nada tiene que ver con las maravillas del famoso libro, por ser
cosas difíciles de entender en el siglo XXI, a causa de la multitud de
estereotipos de género y estereotipos de edad. La catedrática Cosima Rughinis,
nos habla de cómo están ilustrados estos estereotipos en los manuales.
Los
estereotipos de género y de edad abundan en los manuales. Por ejemplo, las
profesiones de las madres, de las mujeres en general, son las de maestras de escuela. En los manuales,
dos terceras partes de las mujeres tienen este oficio, pero la realidad es diferente. Los
estereotipos son en general de índole ocupacional. Las mujeres adultas son
presentadas también en los manuales como amas de casa, y en la mayoría de los
casos están representadas cocinando. Los manuales no reflejan la realidad
diaria y esto es válido también en el caso de los personajes masculinos. Los
manuales ignoran la vida familiar de los hombres o su implicación en la
familia. En cambio, aparecen representados en los puestos de aviadores,
carpinteros o guardaboques.
Los
dibujos de los manuales son anacrónicos en comparación con la sociedad rumana
actual, porque también los textos son anacrónicos. Los niños leen obras
literarias de los siglos XIX y XX, textos que en general reflejan este universo
estereotipado de la mujer madre y mujer maestra de escuela, y raras veces de la
mujer médico pediatra. ¿Por qué siguen
figurando estos estereotipos en los manuales, especialmente ahora, cuando las
mujeres rumanas tienen ocupaciones muy diversas, e incluso los hombres
contribuyen a la cría de sus niños? Cosima Rughinis nos contesta:
Los
encontramos en el ámbito de la imaginación
colectiva o del discurso con respecto a la feminidad o masculinidad. Por otra
parte, los manuales no están acorde con la realidad, dado que la sociedad
actual no concibe que haya mujeres
adultas o jóvenes que no trabajen. Esta discrepancia procede no sólo del
universo literario del siglo XIX incluido en los manuales, sino también de una
inercia de las representaciones. Sin lugar a dudas, estos manuales se realizan
bajo ciertas restricciones de tiempo o financieras. Además no creo que alguien
haya planteado el problema de realizar unos manuales en concordancia con la
vida actual de los niños.
Además
de los estereotipos de género, los manuales de primaria contienen también
estereotipos de edad, considerados aún más peligrosos por los sociólogos.
Cosmina Rughinis nos habla de ellos:
En
Rumanía, los estereotipos de edad son aún más fuertes pero menos analizados, y
creo que no despiertan el mismo interés que los de género. En general, la gente
se indigna al ver estos estereotipos cómicos, pese a que la imagen de unos
abuelitos pueda resultar encantadora. Esto ocurre en las condiciones en que
Rumanía, igual que la mayoría de los países europeos, atraviesa una crisis
demográfica. En este contexto, los ancianos están excluidos tanto de las
actividades sociales, como del imaginario colectivo, y en los manuales
escolares no son presentados como personas activas.
Los
sociólogos no creen que estos estereotipos, con los cuales los niños toman
contacto ya desde su primer año escolar, vayan a influir en la futura elección
de una profesión. Por otra parte, el impacto es mucho más dañino.
No se
corre el peligro de que las muchachas elijan como modelo a una ama de casa.
Tanto las muchachas como los muchachos se inspiran en las películas, en su
entorno social. Corre peligro la credibilidad que ciertas personas transmiten,
como en el caso de las mujeres de negocios. Cuando vemos una mujer de negocios
sentimos que es menos creíble que un hombre de negocios. En algunos manuales de
educación cívica hay capítulos sobre líderes y profesiones representados sólo
por hombres. Su presencia en los
manuales parece reflejar a un determinado imaginario y por ello, creo que las
mujeres carecerán de credibilidad cuando lleguen a dirigir una empresa, o un
partido político.