Los derechos de los pacientes a recibir servicios médicos
La esperanza de vida de los rumanos es más reducida en comparación con otros estados de Europa. Los rumanos viven, de media, 7 años menos que los alemanes, 8 años menos que los españoles y los franceses y 9 años menos que los suizos
România Internațional, 07.05.2015, 15:52
La
esperanza de vida de los rumanos es más reducida en comparación con otros
estados de Europa. Los rumanos viven, de media, 7 años menos que los alemanes, 8
años menos que los españoles y los franceses y 9 años menos que los suizos. Un
informe de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico y de la
Comisión Europea destaca que en Rumanía la mortalidad causada por la diabetes y
el cáncer es más reducida que la mortalidad infantil. Especialmente en el medio
rural donde viven un 46% de la población y un 50% de los niños del país, la
tasa de la mortalidad infantil fue, en 2013, de 10,4 por cada mil niños, frente
al medio urbano donde fue de 6,8 por cada mil niños.
La causa la representa el
parto prematuro registrado en el 10% de los embarazos. Los factores que
influyen en este fenómeno son el estilo de vida, la falta de información y
atención destinada a la prevención y el sistema de sanidad subfinanciado de Rumanía. En el medio rural
se podrían prevenir muchos decesos mediante el desarrollo de programas de soporte
para las madres y los niños, la dotación de las maternidades y las secciones de
recién nacidos, con aparatos médicos de alto rendimiento, según subrayan las
conclusiones del debate titulado Los Derechos de los pacientes: entre la
teoría y la práctica, organizado por la Fundación World Wide Vision Rumanía en
asociación con las Comisiones de especialidad del Senado de Rumanía.
Con este
motivo se ha hecho un llamamiento a todos los directivos del entorno político e
institucional para encontrar soluciones a fin de mejorar el acceso a servicios médicos de calidad, especialmente
para las familias vulnerables que viven en el campo. Los organizadores de los debates
analizaron la diferencia que existe entre la teoría y la práctica cuanto
hablamos de los derechos de los pacientes a los servicios sanitarios de
calidad. La Fundación World Vision Rumanía trabaja especialmente en el medio
rural y se ha percatado de que hay
muchas desigualdades en la posibilidad de acceder los servicios médicos básicos
para los niños que viven en el campo, nos ha declarado Daniela Buzduncea,
directora ejecutiva de la fundación:
En un
estudio publicado el año pasado, titulado El bienestar del niño del medio
rural notamos que uno de cada cinco niños de hasta cinco años de edad no había
sido revisado por un médico en el último año, a pesar de que los niños necesitan atención médica corriente, necesitan ser
vacunados a su debido tiempo y ser vigilados
desde el punto de vista del desarrollo y crecimiento. Si no identificamos a
tiempo los posibles problemas que surgen en el crecimiento del niño, las
intervenciones posteriores no sólo serán más costosas, desde el punto de vista
del presupuesto o la inversión en la salud, sino que resultarán costosas también
para la vida y el desarrollo del niño, para su potencial de llegar a ser una
persona capaz de contribuir social y económicamente. No se ha hecho una
inversión seria en educar a los padres sobre cómo criar a sus hijos. Además,
hay numerosos padres que desconocen el hecho de que independientemente de si
pagan o no sus seguros de salud, sus
hijos se benefician de ellos, conforme con la legislación rumana, de servicios
médicos básicos. Al mismo tiempo, las mujeres embarazadas se benefician de
atención médica, indistintamente de estar o no aseguradas. Desgraciadamente, en
los últimos tiempos, hemos notado una corriente antivacunación y a este
respecto hace falta elaborar una mejor estrategia de comunicación en relación
con la importancia de la vacunación infantil. No existe ningún estudio sólido
que justifique el hecho de que un número tan grande de padres manifiestan o ejerzan
el derecho a negarse a vacunar a sus hijos.
En el
debate participó también el presidente de la Casa Nacional de Seguros de Salud,
el médico Vasile Ciurchea, quien habló, entre otras cosas, de las tarjetas de
salud que desde el pasado 1 de mayo son obligatorias, y sobre los gastos para
curas en el extranjero que la Casa Nacional de Seguros de Salud paga
anualmente, que ascienden a casi 70 millones de euros. Vasile Ciurchea ha
admitido que todavía hay muchas localidades en Rumanía donde no existen médicos de familia. Por ejemplo, en
el Delta del Danubio hay solamente tres
médicos:
A
nivel nacional, 300 localidades no se benefician de un médico de familia.
Algunas de las localidades son muy pequeñas, otras son grandes. Existen casos
similares en las regiones de Moldavia y Transilvania, en general en lugares
díficiles de acceder o zonas desfavorecidas. Precisamente para estimular la
presencia de los médicos en estas regiones, hemos revisado los sobresueldos que
se conceden en el medio rural y mediante el nuevo contrato marco contamos con
un excedente del 25% de los médicos del
campo que reciben un aumento salarial sustancial. Si nos referimos a los del
Delta del Danubio es verdad que exsten condiciones especiales, el sobresuledo
es del 200% y el número de pacientes es muy grande ya que le corresponde a un médico
atender a 4500 pacientes. Por ello tratamos de convencer a las autoridades
locales y departamentales que contribuyan también con un sobresueldo a fin de lograr
que los médicos vayan a trabajar a estas zonas.
La
tuberculosis es una enfermedad que
descubierta temprano, y tratada de manera correspondiente se puede
curar. Desgraciadamente, aquí registramos la mayoría de los casos: uno de cada cinco
europeos diagnosticados con tuberculosis procede de Rumanía. Diariamente en Rumanía,
tres personas pierden la vida a causa de esta enfermedad. Sin tratar, esta
enfermedad representa una amenaza para las personas que viven alrededor del
enfermo. Una sola persona que padece tuberculosis puede contaminar hasta 15
personas anualmente. La necesidad de implicar a las autoridades en la
erradicación de la tuberculosis mediante la financiación de servicios gratuitos
de soporte psicológico y social para los
pacientes, ha sido el tema de una debate organizado recientemente, por la
Fundación Romanian Angel Appeal. Los enfermos de tuberculosis se benefician en 4
clínicas de pneumoftisiologia del país (Bucarest, Bisericani, Baia Mare, y
Leordeni) de servicios gratuitos de
asesoramiento psicológico y social, así como de respaldo financiero para seguir
el tratamiento.
Se
trata de un proyecto de la Fundación Romanian Angel Appeal iniciado el año
pasado mediante el cual 1000 pacientes
son ayudados a superar los inconvenientes de la enfermedad. He aquí lo que nos ha
declarado la doctora Cristina Popa, del Instituto de Pneumoftisiología Marius
Nasta de Bucarest, uno de los cuatro hospitales que se benefician de este tipo
de servicios:
218
pacientes están incluidos en este proyecto y se han efectuado 163 encuestas
sociales. Al mismo tiempo 172 personas se han beneficiado de respaldo
financiero, lo que significa que durante cada mes de medicación administrada
correctamente, los pacientes han recibido 100 lei cada uno y 26 enfermos han
sido matriculados en cursos de formación profesional. Del total de estos 218
pacientes, la mayoría son hombres. Respecto al desarrollo de este programa he
notado que si el paciente recibe informaciones de calidad el acto médico será mejor. Existe también una comunicación
abierta y directa entre los miembros del equipo y el paciente y un papel
importante lo realiza la asistente de la sala de tratamiento que sigue a los
pacientes, lo que les infunde a éstos confianza en los servicios médicos. Pese
a que hasta la fecha hemos registrado
solamente dos pacientes del total de 218,
que han abandonado la cura, creo que el resultado no es malo. Se trata
de un porcentaje del 1% en las
condiciones en que un Programa Nacional de Control de la Tuberculosis acepta
como tasa de abandono un máximo del 10%.
Un paso
importante que Rumanía da en la lucha contra la tuberculosis es la adopción por
parte del Gobierno, de la Estrategia Nacional de Control de la Tuberculosis en
el período 2015-2020. Igualmente importante es el presupuesto asignado a dicha
estrategia que asciende a 1571 millones
lei.