Opiniones sobre la política agrícola común
Una de las iniciativas más antiguas de la historia de la UE, iniciada a principios de los años 60, es la Política Agrícola Común.
Christine Leșcu, 02.05.2014, 17:44
Una de las iniciativas más antiguas de la historia de la UE, iniciada a principios de los años 60, es la Política Agrícola Común. La PAC tiene por objetivo ayudar a los agricultores no solo a producir alimentos, sino también a proteger al medio ambiente, mejorar el bienestar de los animales y apoyar a las comunidades rurales. Esta política ha sufrido varios cambios de contenido a lo largo de los años para adaptarse a la época. La PAC para el periodo 2014-2020 es la más reciente y estuvo precedida por una amplia consulta pública. Ahora, la Comisión Europea ha consultado nuevamente a los ciudadanos europeos para saber su opinión sobre los cambios de la Política Agrícola Común. El Eurobarómetro tiene resultados alentadores: más del 77% de los europeos consideran que la política agrícola común es beneficiosa para todos los ciudadanos de la UE. Más del 90% de ellos están a favor de los principios de la nueva PAC, como las ayudas más equitativas y mejor dirigidas y el intento de establecer una mejor relación entre el apoyo financiero concedido a los granjeros y el uso de las prácticas agricolas beneficiosas para el medio ambiente.
Para los rumanos, la agricultura es vital. Un 92% de ellos considera que la agricultura y las zonas rurales son un tema importante para nuestro futuro, y un 78% de los rumanos considera que la PAC es beneficiosa para todos los ciudadanos europeos, no solo para los agricultores. Por lo demás, estos datos extremadamente favorables para la política agrícola común, son favorables también para todas las instituciones de la UE, según destaca Diana Filip, coordinadora del Centro Europe Direct de Bucarest:
“Los rumanos siguen siendo optimistas respecto a la dirección en la que se dirige la UE y sus políticas y resultados. Aproximadamente la mitad de los encuestados consideran que la UE está en la dirección adecuada para salir de la crisis. Más de la mitad de ellos, es decir un 63%, se muestran optimistas respecto al camino de la UE. Un 11% de ellos se muestra muy optimistas y confían en las políticas europeas en general y en la legislación europea que se aplica en nuestro país.”
Como en casi todos los Eurobarómetros sobre la opinión de los ciudadanos respecto a las instituciones comunitarias, el nivel de información general parece ser bastante bueno. Sin embargo, faltan las informaciones detalladas. Por ejemplo, un 45% de los encuestados conoce el apoyo que la UE concede a los agricultores a través de la PAC, pero no conocen los detalles, mientras que un 36% de ellos afirma no saber nada respecto de este asunto. En este caso, las estadísticas reflejan bastante bien la realidad, según destaca Szőcs Attila, miembro de la Ecoruralis, una asociación de granjeros que practican la agricultura ecológica y tradicional:
“Cuando miro las cifras veo que, en general, los europeos, sean agricultores o no, están satisfechos con la manera en la que se ha creado la reforma. Nuestra asociación va a los pueblos y habla con los pequeños productores, con los campesinos. Pero constatamos que, aunque se conozcan numerosos aspectos de la PAC, esto no se aplica mucho en los pueblos, sobre todo en el caso de los jóvenes. La mayoría de las personas que han dado una respuesta positiva tienen más de 40 años de edad. Es decir que los jóvenes granjeros de Rumanía no conocen todavía las posibilidades que puede ofrecer Europa.”
A pesar de ello, un 62% de rumanos considera que la ayuda financiera concedida a los jóvenes es una iniciativa positiva. Asimismo, un 54% opina que apoyar a los agricultores de manera más equitativa y mejor dirigida es una decisión muy buena, mientras que un 52% se muestra muy contento de que los agricultores que aplican medidas beneficiosas para el medio ambiente reciba ayuda financiera. Sin embargo, Szőcs Attila considera que existe una diferencia significativa entre la opinión de los ciudadanos y lo que hacen las autoridades locales:
“Desgraciadamente, aunque haya voluntad política europea para desarrollar las zonas rurales, se nota que, en el ámbito gubernamental, las políticas que se ponen en marcha parecen contradecir esta voluntad. Aunque en general se acepta la idea de que, en teoría, la PAC podría ayudar, la burocracia nacional no permite desarrollarla. Así, los jóvenes pierden sus esperanzas. Hay pueblos deshabitados, hay jóvenes que se van a otros países para trabajar como jornaleros, teniendo terrenos en casa y padres que les podrían enseñar a trabajar y dirigir una granja.”
Cuando se reduzca la burocracia nacional y se cree una mayor campaña de información, Rumanía podrá desarrollar su potencial de agricultura ecológica. He aquí la declaración de Szőcs Attila:
“Uno de los objetivos de la nueva PAC ha sido ser “más verde”. En Rumanía, aquellos que trabajan de manera “más verde” son los pequeños granjeros de los pueblos que no pueden y tampoco quieren usar productos químicos de síntesis. Así se acercan más a la agroecología, esta nueva corriente que nace en Europa y que representa una innovación. Rumanía tiene numerosas zonas de interés ecológico en las que podríamos practicar la agricultura ecológica. La gente que ya se implica en la agricultura tradicional y ecológica pueden ofrecer productos cualitativos. La aproximación a la agricultura no debería ser productivista, sino integrada, centrada también en la protección del medio ambiente y en el ámbito social y económico. Deberíamos invertir en el desarrollo de estas zonas y en el desarrollo rural en general.”
La primera versión del Plan Nacional de Desarrollo Rural para 2014-2020 se ha enviado ya a la Comisión Europea para las negociaciones a finales del mes de marzo. Algunas de las medidas previstas, las que se refieren a la ayuda concedida a los jóvenes granjeros y a la agricultura ecológica son más visibles que en años anteriores justo para cumplir con la nueva PAC. Como 2014 es el Año Internacional de la Agricultura Familiar, esto podría ser un buen comienzo para los 4.500.000 pequeños granjeros de Rumanía.