Retrospectiva política de la semana
“¡Feliz cumbre!, en Sibiu
Bogdan Matei, 11.05.2019, 14:51
El clímax de la presidencia semestral rumana del Consejo de la Unión Europea ha sido alcanzado este jueves en Sibiu, con la reunión informal de los jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros, excepto el Reino Unido. 36 delegaciones oficiales, 400 invitados de alto nivel, aproximadamente 900 periodistas y 100 traductores han usado en la ciudad del centro del país el saludo, igual de informal, “Happy summit! (¡Feliz cumbre!) asumido inmediatamente por los habitantes de la ciudad. Ha sido una cumbre de la unidad y la determinación para continuar el proyecto de la integración europea, ha declarado el anfitrión de la reunión, el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis. Los participantes han aprobado la llamada “Declaración de Sibiu, un manifiesto centrado en la unidad como principio básico y de construcción del futuro de la Unión. Los firmantes se han comprometido a proteger la forma de vida europea, la democracia y el Estado de derecho, y fija el principio de equidad en el mercado común de trabajo en la seguridad social y la economía. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha afirmado que la cumbre no ha mostrado solamente una aparente unidad, sino una unidad sólida. A su vez, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha anunciado que desea que se presenten nominaciones para la dirección de las instituciones comunitarias hasta el mes de junio, así que convocará una reunión con los líderes de la Unión el 28 de mayo, inmediatamente después de las elecciones para el Parlamento Europeo. El alto cargo ha continuado su discurso en rumano, para felicitar a los organizadores:
“Cuando nos reunimos en enero, a principios de la presidencia rumana, hablé desde el corazón sobre Rumanía, porque estoy convencido de que ustedes son admirables. Han organizado una cumbre excepcional. Pueden estar orgullosos del trabajo que han realizado, de la misma manera que Europa está orgullosa de ustedes. Simplemente me he enamorado de Sibiu. Toda Europa se ha enamorado de ustedes.
Los analistas han afirmado que los efectos del mensaje de unidad y optimismo enviados desde Sibiu se podrán determinar dentro de tan solo dos semanas. Cuando las elecciones confirmarán o invalidarán los sondeos que, en muchos Estados miembros, han registrado cifras al alza para las formaciones euroescépticas o abiertamente antieuropeas.
Ducha fría en Bruselas
La Comisión Europea ha revisado a la baja, al 3,3%, la estimación respecto a la evolución de la economía rumana para este año. En enero, los expertos europeos estimaron un avance del Producto Interior Bruto de un 3,8%, mientras que el presupuesto público de Rumanía para este año se basa en un crecimiento de un 5,5% frente a 2018. El boom económico rumano ha disminuido a partir del año pasado, han advertido los expertos comunitarios. El consumo privado ha quedado como el principal factor determinante del crecimiento económico, fomentado por los incrementos salariales registrados en el sector público, pero sus efectos positivos han sido atemperados por el crecimiento masivo de los precios. El pronóstico también muestra que la incertidumbre y la impredictibilidad de las políticas públicas pueden tener efectos negativos en el consumo y las inversiones, y obstruye el crecimiento económico.
La “Mineriada sin fin
El Tribunal Supremo de Casación y Justicia de Rumanía ha decidido remitir a la Fiscalía General el expediente de la llamada “Mineriada que tuvo lugar del 13 al 15 de junio de 1990, y que puso fin a una amplia manifestación contra el poder de izquierda instalado después de la caída de la dictadura comunista. El juez de la Cámara Preliminar calificó de ilegal la acusación formulada por los fiscales militares y dispuso la devolución del expediente. El fiscal general interino, Bogdan Licu, ha presentado un recurso contra la decisión del tribunal. Hace dos años, la Fiscalía Militar acusó al expresidente Ion Iliescu, al ex primer ministro Petre Roman, al viceprimer ministro Gelu Voican Voiculescu y al director del Servicio Rumano de Inteligencia de entonces, Virgil Măgureanu. Ellos habrían organizado y coordinado directamente, incluso al traer a Bucarest a los mineros del Valle del Jiu (al sudoeste), el ataque contra los manifestantes de la Plaza de la Universidad que estaban expresando pacíficamente sus opiniones políticas opuestas a las de la mayoría que integraba el poder político de la época. 1.300 heridos, más de mil personas retenidas de manera abusiva y por lo menos seis muertos. Éste es el balance del día más dramático de la historia poscomunista del país. Hace cinco años, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos emitió una decisión que obligaba a Rumanía a continuar las investigaciones en el caso de la “Mineriada que tuvo lugar en junio de 1990.
Rumanos en el mundo
El ministro de Exteriores, Teodor Meleşcanu, ha solicitado al presidente Klaus Iohannis que llame a consultas al embajador de Rumanía en Washington, George Maior. En un comunicado del Ministerio se ha afirmado que esta propuesta ha sido formulada tras un análisis del mandato del diplomático, cuyas acciones “ya no le permiten promover de forma creíble los intereses de Rumanía en Estados Unidos, colaborador estratégico de Bucarest. En abril, la comisión parlamentaria de especialidad acusó a Maior de que durante casi diez años en la dirección del Servicio Rumano de Inteligencia, antes de ser enviado a Washington, habría usado el servicio para fines personales y habría afectado gravemente a los derechos y las libertades fundamentales de los ciudadanos rumanos y los intereses del país. El embajador se ha declarado consternado por las acusaciones y ha pedido la desclasificación integral de las comparecencias desarrolladas en la Comisión parlamentaria para el control de la actividad del SRI. También se espera que el exalcalde socialdemócrata de Constanza (la mayor ciudad rumana con puerto al mar Negro), Radu Mazăre, vuelva a Rumanía después de haber sido detenido en Madagascar. En febrero se emitió una orden de búsqueda internacional a su nombre, después de haber sido condenado definitivamente a nueve años de prisión en un caso de devoluciones ficticias de terrenos, uno de los numerosos casos de corrupción en el que estuvo implicado como alcalde durante 15 años y cuatro mandatos.
(Bogdan Matei)