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Reacciones ante la idea de una Europa de dos velocidades
România Internațional, 04.03.2017, 18:31
El presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, presentó el pasado miércoles, 5 escenarios sobre el futuro de la UE tras la salida del Reino Unido del bloque comunitario. El documento, conocido como la Carta Blanca, marca el inicio de un proceso a través del cual los 27 países miembros decidirán juntos el futuro de la UE. La Carta analiza el modo en que Europa cambiará en los próximos 10 años, desde el impacto de las nuevas tecnologías sobre la sociedad y los puestos de trabajo, a las dudas que despierta la globalización, las preocupaciones sobre temas de seguridad y el crecimiento del populismo. Los cinco escenarios proponen ideas como la limitación del mercado único europeo o una Europa federalizada. Otra opción sería una Europa de distintas velocidades, con un desarrollo más rápido de algunos países miembros sin que el resto del bloque tenga que seguir el mismo ritmo. Esta opción ya ha generado preocupación entre los países del este, entre ellos Rumanía. Bucarest rechaza la idea de una UE de distintas velocidades. Éste ha sido el mensaje enviado por las autoridades, que también creen que una integración diferenciada podría agravar las discrepancias económicas y sociales entre los países miembros. En Bruselas, el eurodiputado rumano Victor Boştinaru ha pedido un debate político a nivel nacional sobre el concepto de una Europa de dos velocidades. El asunto ha sido abordado incluso por el presidente rumano Klaus Iohannis, durante su reunión con el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, cuyo país ha asumido la presidencia semestral de la UE. El jefe del Estado ha rechazado firmemente la idea de una Europa de dos velocidades y ha dicho que las fórmulas de reconfiguración de la UE podrían determinar una desintegración del proyecto europeo. Tanto el presidente, como también el primer ministro Sorin Grindeanu han destacado, durante las conversaciones con el jefe del Ejecutivo maltés, que en el ámbito comunitario necesitamos una postura unitaria sobre el mantenimiento del mercado único y de los derechos de los ciudadanos europeos que viven en el Reino Unido tras el brexit. Los dos primeros ministros también han analizado los preparativos que se deben hacer antes de que Rumanía asuma la presidencia de turno de la UE, en el primer semestre de 2019.
La absorción de fondos europeos es la principal prioridad del Gobierno de Grindeanu
La principal prioridad del Gobierno rumano será atraer fondos europeos por un valor de 5.200 millones de euros antes de fin de año, ha anunciado la ministra de Desarrollo Regional y vice primera ministra, Sevil Shhaideh. Rumanía ha perdido ya 3.500 millones de euros de los fondos europeos que habría podido utilizar en el periodo 2007-2013, y del dinero asignado para 2014-2020, que alcanza unos 30.000 millones de euros, Bucarest solo ha logrado absorber un 1%. A nivel europeo, la tasa de absorción se sitúa en un 3 % para el calendario financiero 2014-2020. En Varsovia, donde ha participado en la reunión de los ministros encargados de la política de cohesión de los países miembros del Grupo de Visegrado, a los que se suman Bulgaria, Croacia, Rumanía y Eslovenia, la ministra rumana de Fondos Europeos, Rovana Plumb, ha declarado que después de 2020 la política de cohesión deberá mantenerse como el principal pilar de las inversiones en el ámbito de la UE. Plumb también ha dicho que una política de cohesión fuerte y eficiente generará un aumento inteligente a largo plazo, contribuyendo a la integración en todas las regiones europeas.
Investigación sobre la diferencia en la calidad de los alimentos comercializados en el este y en el oeste de Europa
La existencia de una diferencia en la calidad de los productos alimentarios comercializados en Occidente y en los países del Este será investigada incluso por las autoridades rumanas, ha anunciado el ministro de Agricultura, Petre Daea. La decisión se ha tomado tras haber señalado algunos Gobiernos de los países del este de Europa que algunos fabricantes utilizan ingredientes más baratos para los productos vendidos en Europa Central y Oriental. La legislación europea no prohíbe estas prácticas, ya que la UE solo requiere poner los ingredientes en la etiqueta de los productos. Por su parte, los fabricantes han explicado que las diferencias en la composición se deben a los gustos locales. Los líderes de los países miembros del Grupo de Visegrado, la República Checa, Hungría, Polonia y Eslovaquia, quieren que la UE tome medidas contra los productores de alimentos que utilizan ingredientes de mala calidad para los productos vendidos a los países más pobres.
La visita del ministro rumano de Exteriores, Teodor Meleşcanu, a Budapest
A principios de esta semana, el jefe de la diplomacia rumana, Teodor Meleşcanu, ha hecho una visita a Budapest, donde se ha reunido con su homólogo húngaro, Péter Szijjártó y con el primer ministro Viktor Orban. Durante las conversaciones, han puesto de manifiesto la idea de convertir las relaciones entre Rumanía y Hungría en un modelo, incluso para otros países de la región. Según ha destacado el ministro rumano, las partes tienen prevista una reunión de sus Gobiernos, así como una sesión conjunta de la Comisión Mixta de Cooperación entre los dos países. Por su parte, el ministro húngaro ha destacado que en el marco de las relaciones entre Bucarest y Budapest necesitamos tener un diálogo y ha expresado su esperanza de encontrar una solución para los asuntos sensibles, como la situación de las minorías. En la agenda de Melescanu también ha figurado una reunión con representantes de la comunidad rumana. Además, por primera vez en la historia, un ministro rumano ha pronunciado un discurso en la reunión anual de la diplomacia húngara.
(trad simona sarbescu )
