Plan de dotación del Ejército
El Ejército Rumano quiere adquirir armamento moderno.
Bogdan Matei, 23.03.2023, 12:31
País clave en el flanco oriental de la OTAN, con salida al mar Negro y vecino de la Ucrania invadida por las tropas rusas, Rumanía está obligada a gestionar una situación muy complicada de seguridad. Además, al no ser precisamente una de las economías fuertes de la Alianza del Atlántico Norte, el país tiene que gastar atentamente el dinero asignado a este sector. El informe de la OTAN relativo al año 2022, que el secretario general, Jens Stoltenberg, ha presentado esta semana, sitúa a Rumanía en la undécima posición del total de 30 países aliados, con un 1,75 % del Producto Interior Bruto (PIB) asignado al sector de la defensa.
De distintas ideologías políticas, los gobiernos de coalición de Rumanía asignaron, en los años anteriores, al Ejército y a los demás órganos de fuerza, el 1,86 % del PIB en 2021, poco más del 2 % en 2020 y el 1,84 % del PIB en 2019.
Los Estados miembros de la OTAN se comprometieron en repetidas ocasiones a invertir el 2 % de su PIB en gastos militares, pero este umbral sólo lo han rebasado siete de los aliados. El Ministerio rumano de Defensa ha pedido el visto bueno del Parlamento para adquirir sistemas de armamento nuevos, obuses, misiles aire — aire y vehículos de combate. Estos programas de dotación se enmarcan en un objetivo más amplio de transformación del Ejército Rumano hasta el año 2040. Su papel es lograr estructuras militares flexibles y modernas, dodatas de medios que les aseguren la supervivencia en el campo táctico, una mayor movilidad y un conocimiento más amplio de la situación, así como una mayor capacidad de fuego, señala la solicitud del Ministerio.
Las mesas permanentes de las dos cámaras del Parlamento, reunidas en sesión conjunta, han decidido remitir la solicitud a las comisiones parlamentarias de Defensa y, según la prensa rumana, es casi seguro que la solicitud recibirá el visto bueno de dichas comisiones.
Los programa de dotación, afirman los expertos militares, también se proponen hacer operativas las metas que Rumanía ha asumido dentro de la OTAN y de la Unión Europea. En el listado de adquisiciones del Ejército hay técnica moderna, y el valor total del programa de dotación está estimado en 4,2 mil millones de euros. Para un país que está lejos de haber solucionado muchas de sus emergencias económicas y sociales, las adquisiciones de armamento para el Ejército Rumano parecen muy costosas. Pero la seguridad misma cuesta dinero, y las investigaciones sociológicas confirman que la población entiende esta verdad.
Nuestras últimas encuestas, decía el secretario general de la OTAN, muestran que el 82 % de la población de los países aliados piensa que Norteamérica y Europa tienen que colaborar, para preservar la seguridad. El 61 % de la gente piensa que ser miembro de la OTAN reduce el riesgo de un ataque armado. «La OTAN ha hecho posible una paz de 75 años, tanto en Norteamérica, como en Europa. Pero, hoy en día, vivimos en un mundo que afronta los mayores peligros posteriores a la Segunda Guerra Mundial», concluyó el secretario general Stoltenberg.
Traducción al español: Gabriela Ristea