Vacunación y pruebas
El Ministerio rumano de Sanidad quiere incrementar el número de pruebas para detectar los casos de COVID-19 y habla de nuevos índices de comunicación respecto a la realización de pruebas.
Daniela Budu, 28.01.2021, 14:02
El Ministerio rumano de Sanidad considera que es necesario hacer cambios respecto a los índices en la comunicación sobre las infecciones por el nuevo coronavirus y respecto al número de pruebas diarias. La secretaria de Estado Andreea Moldovan ha afirmado que, actualmente, las cifras oficiales no reflejan la situación actual en Rumanía, dado que se realizan menos pruebas de lo que sería necesario, y no se comunican muchas pruebas positivas. La mandataria anima a usar las pruebas rápidas de antígenos. Andreea Moldovan:
“Al tener a mano pruebas muy rápidas y al obtener el resultado en aproximadamente 15 minutos, categóricamente que podrá aumentar la capacidad de pruebas. Esto no pasa actualmente. Todavía hay una latencia respecto a la realización de pruebas en los centros médicos y sobre todo respecto a la información sobre estas pruebas. Además, las pruebas se realizan también en casa. Hay muchas personas que se hacen la prueba, un miembro de la familia da positivo, y los demás ya no se hacen la prueba, porque ya no tiene sentido usarla, y esta prueba no se comunica. Queremos destacar la importancia de la prueba y de la comunicación justamente para tener la imagen correcta.”
Asimismo, las autoridades conversan sobre un cambio respecto a los índices de comunicación de los casos de COVID-19, y uno de los cambios será el de no excluir los casos registrados en los focos a la hora de calcular el índice de infección en una localidad, como pasa actualmente. Andreea Moldovan considera que ocultar la realidad no genera ningún beneficio a Rumanía. “Con estos índices se puede conocer la situación en el país y se pueden tomar posibles medidas. No las tenemos que considerar restricciones, sino medidas que nos ayudan a controlar la situación”, ha afirmado también la mandataria. La médica también ha afirmado que, dado que en los países europeos, y no sólo en ellos, el número de casos de COVID-19 aumenta de forma alarmante, y estos países imponen restricciones adicionales, las autoridades rumanas se ven obligadas también a estar preparadas y a saber exactamente lo que tienen que hacer.
Respecto a la vacunación, las autoridades han anunciado que a partir del 1 de febrero, en los centros de vacunación de Rumanía comenzará también la vacunación con Moderna además de Pfizer. Asimismo, empieza la reprogramación de las personas incluidas en la segunda etapa de vacunación en la categoría de los sectores esenciales. Hay más de 35.000 personas que tenían cita para vacunarse estos días y que serán reprogramadas con diez días de retraso. Esto después de que la semana pasada Rumanía recibiera solamente la mitad de las dosis de vacuna previstas para ser entregadas, y la prioridad en esta etapa de la inmunización deben ser las personas mayores y los enfermos crónicos.
Versión española: Monica Tarău