La UE y la libertad de circulación durante la pandemia
Reunidos en el marco de una cumbre virtual, los líderes de la UE han abogado por desalentar los viajes no esenciales como medida de protección sanitaria.
Corina Cristea, 22.01.2021, 13:41
En su intento de frenar la propagación del coronavirus que ya ha provocado más de 2.100.000 decesos a nivel global así como mutaciones mucho más contagiosas, los líderes de la UE han acordado que los países de la Unión Europea puedan restringir los viajes intracomunitarios no esenciales, calificando la situación sanitaria de “muy grave”. Los debates que tuvieron lugar el jueves en el marco de una cumbre de los Veintisiete, organizada en régimen de videoconferencia, indican la preocupación común de los países comunitarios de coordinarse para mantener el funcionamiento del mercado interno y del transporte de las mercancías. Se analizó incluso la situación de los trabajadores transfronterizos para que no haya más situaciones similares a las de la primavera del 2020 cuando al comienzo de la pandemia, las decisiones de los Estados miembros de cerrar las fronteras generaron disfuncionalidades importantes.
“Estamos cada vez más preocupados por las diferentes mutaciones del coronavirus”, ha subrayado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien, al señalar las recomendaciones del Centro Europeo para el Control de las Enfermedades, ha abogado por desalentar los viajes que no son absolutamente necesarios. La jefa de la Comisión Europea también ha hablado de una nueva definición de las zonas de riesgo que pueda abarcar territorios de varios Estados miembros y en los que las medidas sanitarias sean coordinadas:
“El virus no conoce fronteras así que podemos tener una zona de dos Estados miembros con la misma situación epidemiológica, pero si en una parte de la frontera se ha impuesto cuarentena estricta y en la otra las tiendas están abiertas, inmediatamente la gente de la primera parte viajará a la segunda para hacer compras, por ejemplo, y así se propaga más intensamente el virus. Debemos tener zonas homogéneas, con medidas establecidas de manera coordinada por dichos Estados miembros para mantener abierto el mercado interno.”
Los ciudadanos de aquellas zonas, con alto riesgo epidemiológico, deberán realizarse una prueba antes del viaje y una cuarentena a su llegada a cualquier país miembro. En cuanto a los países fuera de la UE, “proponemos tomar medidas de seguridad adicionales para aquellas personas que viajen desde terceros países en viajes importantes a Europa exigiendo pruebas antes de la salida al lugar de origen”, ha añadido la presidenta de la Comisión.
En víspera de la cumbre, los europeos han logrado acordar también el reconocimiento recíproco de los resultados de las pruebas, tanto PCR como las pruebas rápidas de antígeno, un progreso validado el jueves por la noche. El bloque comunitario se ha propuesto al mismo tiempo aumentar en un 5% la verificación de las pruebas positivas de COVID-19 para detectar las posibles mutaciones. Asimismo, los Estados miembros han apostado por acelerar la campaña de vacunación, teniendo en cuenta que la Comisión Europea ha pedido que para verano ya esté inmunizada un 70% de la población adulta.