La muerte de un símbolo anticomunista
El coronavirus ha quitado a los rumanos a uno de los últimos símbolos morales.
Bogdan Matei, 26.03.2020, 15:56
El escritor y militante anticomunista rumano Paul Goma ha muerto a los 84 años en un hospital en París, donde había sido ingresado por haber sido infectado por el nuevo coronavirus. Después del rey Miguel, en 2017, y la profesora Doina Cornea, en 2018, fallece otro símbolo ejemplar de la resistencia anticomunista rumana.
Paul Goma nació en 1935 en Besarabia (este), en una familia de maestros que, cinco años más tarde, se refugió en la Rumanía más pequeña tras la anexión de los territorios del este a la Unión Soviética. Por su postura hostil al régimen comunista de Bucarest, satélite de Moscú, Paul Goma fue detenido en 1956 y fue condenado a dos años de prisión, y después en arresto domiciliario hasta 1963. En 1977, la Securitate, la policía política del régimen, lo detuvo, lo investigó y lo torturó nuevamente por haber criticado la dictadura de Nicolae Ceauşescu. Fue prácticamente expulsado a Francia, y los comunistas le retiraron la ciudadanía rumana. En París, fue víctima de una tentativa de asesinato con un paquete bomba, tentativa organizada por la Securitate. Paul Goma es el autor de más de 30 libros de ficción, memorialística e historiografía, muchos de ellos incendiarios por su valentía. Incansable panfletista, él mismo fue sujeto de su propio sarcasmo. Paul Goma, en una de sus pocas entrevistas concedida a Radio Rumanía:
“A mí me llevaron las olas de la historia. No fui un indignado, sino que sólo fui una persona que soportó, como alguien de Besarabia, como un refugiado y como persona normal. Alguien que, cuando escuchaba o se le decía algo que no le gustaba o le parecía falso decía: no, no es verdad. Es decir el tonto de la clase que hablaba sin pensar.”
Paul Goma será siempre una persona que despertó la esperanza y fortaleció la resistencia en nuestras almas, ha afirmado el primer ministro Ludovic Orban en un mensaje tras la muerte del militante anticomunista. La familia real de Rumanía también lamenta el fallecimiento de este escritor y ha afirmado que fue “una de las figuras emblemáticas de la resistencia intelectual contra la dictadura”.
Versión española: Monica Tarău