El escenario político rumano después de las elecciones europeas
Antes de las vacaciones de verano, la clase política de Bucarest está muy agitada.
Bogdan Matei, 13.06.2019, 15:30
El voto de los rumanos en los comicios europarlamentarios del 26 de mayo ha enviado a Bruselas seis formaciones políticas. El Partido Nacional Liberal, la principal fuerza de la oposición de derecha, ha obtenido el mayor número de votos, el 27% de los sufragios, y diez escaños de diputados europeos. Le siguen dos fuerzas políticas que prácticamente han empatado: el PSD, principal partido en la coalición en el Gobierno, y la Alianza 2020 integrada por la Unión Salvar Rumanía y PLUS (en la oposición). Cada uno de ellos ha obtenido un 22,5% de los votos y ocho diputados. Con un 5-6% de los sufragios, PRO Rumanía, la Unión Demócrata de los Húngaros de Rumanía y el Partido Movimiento Popular han obtenido sendos dos escaños. Se han situado por debajo del umbral electoral del 5% las demás siete formaciones que participaron en el escrutinio, incluida la ALDE, socio-junior en el Gobierno al lado de los socialdemócratas.
El mismo día, los rumanos fueron llamados a participar en un referéndum sobre cuestiones de la justicia convocado por el presidente Klaus Iohannis. Más de un 80% de los que expresaron su opción en la consulta popular han respondido que están de acuerdo con prohibir la amnistía y el indulto para delitos de corrupción y con prohibir la adopción, por parte del Gobierno, de ordenanzas de urgencia sobre delitos, penas y organización judicial. Al día siguiente de las elecciones, el hombre fuerte de la coalición gubernamental, el líder del PSD, Liviu Dragnea, fue condenado por el Tribunal Supremo a tres años y medio de prisión por corrupción.
Ya fragilizada, la coalición gubernamental se enfrentará a los debates y la votación de la moción de censura introducida por la oposición contra el Gabinete dirigido por la jefa interina del PSD, Viorica Dancila. Rumanía necesita urgentemente un Gobierno con una visión proeuropea, según ha afirmado el diputado liberal Gigel Stirbu en la presentación del miércoles del texto de la moción:
“El PSD y la ALDE han dividido el país, han destruido el papel de las instituciones fundamentales, han mutilado leyes importantes, han perdido la oportunidad de modernizar el país y han violado constantemente las bases de la democracia rumana y del Estado de derecho.”
Iniciada por el PNL, la Unión Salvar Rumanía y el Partido Movimiento Popular, la moción de censura está firmada por 173 senadores y diputados. Para ser aprobada por el pleno reunido en el Parlamento, el documento necesita 233 votos favorables. Han prometido que votarán la moción tanto el Partido PRO Rumanía, fundado por disidentes del PSD, como la UDHR que el mes pasado rompió el protocolo de colaboración con el Gobierno. El sucesor de Dragnea en la dirección de la Cámara de los Diputados, el socialdemócrata Marcel Ciolacu está convencido de que la moción no será aprobada y el Gobierno Dancila sobrevivirá:
“Nuestra estrategia es rechazar esta moción. No se ha tratado de votar o no votar. La decisión importante ha sido asegurar el cuórum. Esto le incumbe al poder. Nuestros compañeros también tendrán que tomar una decisión. No se trata de desconfiar de alguien.”
Los debates y la votación de la moción de censura están programados para el martes, 18 de junio.