Crisis política aguda en la República de Moldavia
La República de Moldavia (exsoviética, con mayoría de rumanohablantes) está paralizada por la guerra política a la que se enfrenta el país.
Bogdan Matei, 10.06.2019, 16:00
El presidente socialista filorruso Igor Dodon ha solicitado la mediación internacional para resolver la crisis política de Chişinău, una crisis de una magnitud sin precedentes en casi tres decenios de independencia. Simplificando, el Tribunal Constitucional y el Gobierno en funciones formado por el Partido Demócrata, ambos controlados por el controvertido e impopular oligarca Vladimir Plahotniuc, por un lado, se oponen a Dodon y a la nueva mayoría parlamentaria de izquierda-derecha, por otra parte. El sábado y el domingo, la guerra política ha alcanzado su punto máximo. El Tribunal Constitucional ha decidido cesar temporalmente de sus funciones al presidente Igor Dodon y ha designado como sustituto provisional al ex primer ministro del país Pavel Filip. Como respuesta, los diputados socialistas y del bloque ACUM, un cuartel de la derecha proeuropea, han instalado otro Gobierno dirigido por la antigua ministra de Educación, Maia Sandu. Los dos equipos ejecutivos se acusan recíprocamente de haber usurpado el poder. Sandu afirma que el Partido Demócrata bloquea el funcionamiento del Estado y después de que el jefe de la Policía se negara a reconocer la autoridad del nuevo ministro de Interior, pide a los empleados públicos y de las instituciones de defensa y seguridad que aseguren el traspaso pacífico de poder. Plahtoniuc ha sacado a sus admiradores a la calle y les ha pedido que estén preparados para defender las instituciones estatales.
En nombre de la Rumanía vecina, Klaus Iohannis se ha dirigido a todas las fuerzas políticas de República de Moldavia con un fuerte llamamiento al respeto por la democracia y el Estado de derecho. La estabilidad de la República de Moldavia es esencial para la trayectoria europea del país, que se ha comprometido a llevar a cabo un proceso de reforma integral, incluidos el Estado de derecho y la buena gobernanza, según un comunicado de la Administración Presidencial de Bucarest. Asimismo, el Gobierno rumano ha anunciado que sigue de cerca los acontecimientos políticos de la República de Moldavia y hace un llamamiento a todas las fuerzas políticas para que respeten el proceso democrático. También Bruselas ha hecho un llamamiento a la calma. La Unión Europea está preparada para colaborar con un Gobierno legítimo desde el punto de vista democrático, en base a un compromiso mutuo con las reformas y los principios fundamentales consagrados en el Acuerdo de Asociación, según se afirma en la declaración común de la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, y del comisario de Política de Vecindad, Johannes Hahn. Moscú señala que es muy importante que las fuerzas que determinan el vector exterior de desarrollo de la República de Moldavia expresen la verdadera voluntad del pueblo. Todo esto sucede después de tres meses y medio de intentos fracasados de formar una mayoría parlamentaria tras las elecciones del pasado 24 de febrero. Entonces, los socialistas, el PD y el bloque ACUM se adjudicaron cada uno de ellos casi un tercio de los escaños de diputados. Según los analistas, esto refleja también la fragmentación dramática de la sociedad entre prooccidentales y filorrusos, entre los adeptos de la lucha anticorrupción y los del régimen oligarca.