Informe sobre los fraudes con fondos europeos
Rumanía es líder en la clasificación de las investigaciones que la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude emprendió en 2017.
Bogdan Matei, 07.06.2018, 14:15
Ya conocida en todo el espacio de la comunidad como OLAF, la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude ha anunciado que, tan sólo el año pasado, emprendió 197 investigaciones que dieron lugar a 309 recomendaciones y a la recuperación de 3 000 millones de euros para la bolsa de la Unión Europea. Una de las características que los casos cerrados comparten es la existencia de un pacto secreto entre el ganador de una licitación y, o bien el consultor o el beneficiario de la financiación. El conflicto de intereses ocupó también un lugar importante en los casos cerrados, lo que implicó, a veces, personas políticas y proyectos amplios de contratación pública. Según la prensa europea, tres países del este de la Unión, Rumanía, Hungría y Polonia, parece que fueron el centro de los estudios y las investigaciones más intensas. “No hay necesariamente una relación entre el número de investigaciones y el nivel de corrupción de un determinado país. Si tenemos una investigación consistente, significa que nos beneficiamos de una buena cooperación de un determinado país, señaló en director general de la OLAF, el británico Nicholas Ilett.
Once investigaciones se refieren al uso de los fondos europeos en Rumanía, que es líder en la clasificación de casos cerrados en 2017. Dos investigaciones relacionadas con los proyectos financiados por el Fondo Europeo de Desarrollo regional son ilustrativas. Los representantes de un municipio, que era el beneficiario, arreglaron con los representantes de la compañía que elaboró el proyecto técnico de una carretera, el establecimiento de criterios restrictivos en los documentos para la licitación. Así, concedieron la ventaja a un determinado agente económico, que ganó el contrato después de que el resto de los participantes a la licitación hubieran sido rechazados en la fase de evaluación inicial. Las partes implicadas falsificaron un gran número de documentos, incluso el proyecto técnico de la carretera, según constató la OLAF, que calculó que el daño financiero a la bolsa de la UE ascendía a aproximadamente 21 millones de euros. La agencia recomendó a la Dirección General para Políticas Regionales y Urbanas de la Comisión Europea que recuperase la totalidad del dinero y transmitió recomendaciones judiciales a la Dirección Nacional Anticorrupción de Bucarest para iniciar acciones judiciales. En noviembre de 2017, los fiscales rumanos anticorrupción presentaron cargos contra altos cargos políticos por fraude con fondos europeos, asociación delictiva y abuso de poder para intereses propios. Para asegurarse de que los daños fuesen recuperados, confiscaron los bienes y bloquearon las cuentas bancarias de las personas en cuestión. En otro caso, transnacional en esta ocasión, la OLAF puso fin a un negocio complejo de fraude mediante el cual se malversaron fondos comunitarios de más de 1,4 millones de euros, que estaban destinados a la construcción de unos prototipos de aerodeslizadores para intervenir en situaciones de emergencia. La investigación constató irregularidades cometidas en el cuadro de un proyecto de investigación e innovación, ganado por un consorcio europeo con dirección italiana y con socios en Francia, Rumanía y el Reino Unido.