Planes de recuperación de la compañía TAROM
Al estar en pleno proceso de reevaluación y reorganización, la compañía TAROM podría acabar este año con beneficios, lo que no ha sucedido desde 2007.
Corina Cristea, 29.03.2018, 11:35
Creada en 1954 y operando bajo la autoridad del Ministerio de Transportes, la Compañía Nacional de Transportes Aéreos Rumanos, TAROM, se propone volver a convertirse en el operador aéreo más importante en el mercado rumano. El objetivo es ambicioso, en el contexto en que el año 2017 no fue bueno para TAROM, al igual que los anteriores diez años, en los que la compañía registró pérdidas significativas. Las cifras muestran que sólo el año pasado se registraron pérdidas de 42 millones de euros.
El personal sobredimensionado, los aviones con problemas técnicos, la renuncia a algunos vuelos o la retirada de dos aviones son solamente algunas de las razones que han empeorado la situación del operador nacional de transporte aéreo. La competencia de las compañías de bajo coste, la manera ineficiente de vender los billetes y el crecimiento del nivel de insatisfacción de los clientes son otras causas que han conllevado la pérdida de la cuota de mercado para TAROM. Una compañía con aproximadamente dos mil empleados, de los que un 70% son familiares o conocidos, y que según un informe del cuerpo de control del ex primer ministro Mihai Tudose, sería saboteada incluso desde el interior. Algunos empleados de TAROM intercambiaban correos electrónicos con otros empleados en los que decían exactamente cuál era la estratégia de la compañía respecto a la manera de tomar unos vuelos.
Además, según las instituciones del Estado, TAROM habría pagado durante varios años algunos costos de mantenimiento y reparación un 40% mayores para cada avión frente a cualquier otra compañía de Europa. Cinco directores pasaron por la dirección de TAROM sólo en 2017. El último, Wolff Werner-Wilhelm, quien siguie gestionando la situación de TAROM, ha afirmado que la actual dirección consiguió reducir el año pasado los gastos en 12,7 millones de lei (aproximadamente 2,7 millones de euros) optimando la actividad de la compañía.
Ahora, al estar en pleno proceso de reevaluación y reorganización, TAROM tiene grandes planes, y según el proyecto sobre el presupuesto destinado a los ingresos y los gastos para 2018, podría acabar el año con beneficios. Se ha asignado también dinero para las inversiones. Según el nuevo programa gubernamental 2018 — 2020 publicado a finales del mes de enero de este año, la urgente renovación de la flota de TAROM comprando por leasing unos 27 aviones modernos y abriendo nuevas rutas zonales o de correo hacia Estados Unidos o Asia son algunas de las medidas destinadas para volver a colocar a la compañía en la elite de los “embajadores de Rumanía”. Ha comenzado ya el proceso de relanzamiento de algunos nuevos vuelos internos, y los primeros dos aviones llegarán durante las proximas semanas.