Las leyes de la Justicia reciben nuevamente el visto bueno del Parlamento
A pesar de las protestas de la oposición, el Legislativo de Bucarest ha votado las leyes de la Justicia, que llegan ahora al presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, para ser promulgadas.
România Internațional, 27.03.2018, 17:48
Corregidas tras las recientes decisiones del Tribunal Constitucional, las leyes de la Justicia que reglamentan el estatuto de los magistrados, la organización judicial y el funcionamiento del Consejo Superior de la Magistratura han recibido el visto bueno del Senado de Rumanía, que es foro decisional en este caso. En dichas leyes no se han operado enmiendas de fondo en comparación con la versión adoptada anteriormente por la Cámara de los Diputados. Por lo tanto, la mayoría parlamentaria, integrada por el Partido Social Demócrata y la Alianza de los demoliberales ha pasado el paquete legislativo por el Parlamento rápidamente y sin grandes problemas.
Entre los cambios más importantes está el quitarle al presidente de Rumanía las atribuciones de nombrar al jefe de la Alta Corte de Casación y Justicia, pasando esto a cargo del Consejo Superior de la Magistratura. Se ha redefinido también el error judicial de los magistrados en el cargo, precisando que el Ministerio de Hacienda informará a la Inspección Judicial para verificar si el error ha sido cometido por un fiscal o un juez, por mala fe o por grave descuido.
La oposición ha afirmado que estas leyes crean controversias, y las modificaciones hechas dejan lugar a abusos y ponen en tela de juicio la independencia de la Justicia. Por ello, los senadores del Partido Nacional Liberal, la Unión Salvad Rumanía y el Partido Movimiento Popular han votado en contra, criticando la rapidez de los debates. Las enmiendas de la oposición han sido rechazadas, pero los liberales atacarán nuevamente en el Tribunal Constitucional estas tres leyes de la Justicia, según ha anunciado el diputado del PNL, Ioan Cupşa:
“Mediante este procedimiento de reexaminación han sido modificados algunos textos que no fueron declarados inconstitucionales por el Tribunal y que no tienen una conexión directa y funcional con los demás textos, y por lo tanto infringen otras decisiones del Tribunal Constitucional, así como la práctica en este sector.
Durante los debates en el pleno, el senador del PSD, Şerban Nicolae, ha contraargumentado afirmando que más de un 90% de los textos que han recibido el visto bueno proceden de las asociaciones de magistrados. En su opinión, las leyes han sido elaboradas con profesionalidad y buena fe. Şerban Nicolae:
“Hasta ahora nadie, ni de Bruselas, ni de Bucarest o de otra parte del mundo, ha podido mostrar qué texto de la propuesta legislativa, de la versión que ha recibido el visto bueno del Parlamento en el primer debate o en la Cámara de los Diputados, después de la reexaminación pedida por la decisión del Tribunal Constitucional, pondría bajo el control político, afectaría de alguna manera la independencia del sistema judicial de Rumanía. La explicación es muy sencilla: nadie ha podido identificar un texto, porque no existe algo así.
Tras el voto del Senado, las leyes reexaminadas irán al presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, para ser promulgadas. Algunas de las modificaciones iniciales generaron grandes manifestaciones y críticas por parte de algunos magistrados.