Opiniones sobre las leyes de la Justicia
Bajo la consigna “no somos una nación de ladrones, decenas de miles de ciudadanos salieron a la calle el pasado domingo en Bucarest y en otros lugares, para protestar contra los proyectos de modificación de las leyes de la Justicia.
Bogdan Matei, 07.11.2017, 15:15
Los comentaristas prevén un otoño tórrido en Bucarest y han denominado al mitin y la marcha del pasado domingo como el desencadenante de la segunda gran ola de protestas antigubernamentales, después de la organizada al comienzo del año.
Entonces, el intento del Ejecutivo PSD-Alianza de Liberales y Demócratas de modificar mediante ordenanza de urgencia los Códigos Penales, sacó a la calle en la más amplia acción de protesta de la Rumanía postcomunista, a cientos de miles de manifestantes que acusaban al poder de tratar de salvar de la pena de cárcel a personas influyentes de la política y la administración acusadas de delitos de corrupción.
En el presente, los manifestantes declaran que temen un nuevo intento de subordinación política de la justicia mediante el traslado de la Inspección Judicial bajo la autoridad del Consejo Supremo de la Magistratura que depende del Ministerio, y quitándole al presidente Iohannis el derecho a nombrar a los jefes de las Fiscalías General, Anticorrupción y Antimafia. Dimisionario del ministerio de Justicia después de las protestas del invierno, el vicepresidente de la Cámara de los Diputados, el socialdemócrata Florin Iordache ha declarado lo siguiente:
“Considero que las solicitudes de los manifestantes ya están previstas en la ley. Desgraciadamente, o hay una gran desinformación o los que protestan desconocen las leyes, porque para ambos problemas, a saber el de nombrar y revocar a los fiscales, tenemos previsto que el presidente dé la última firma mientras que con respecto a la Inspección Judicial hemos decidido que ésta sea una institución independiente. En consecuencia, antes de protestar ¡veamos primero las leyes!
La oposición de derecha ha anunciado que respalda la participación de sus miembros y simpatizantes en las manifestaciones organizadas por la sociedad civil. Pese a una imagen velada por los casos de corrupción en que están implicados muchos de sus miembros preeminentes, el PNL se ha declarado solidario con las manifestaciones de la calle a favor de la independencia de la justicia y la continuación de la lucha anticorrupción. Escuchemos al líder liberal, Ludovic Orban:
“Por supuesto que he animado a los simpatizantes del partido, a los miembros del partido, a participar en estas formas de protesta, porque la posición del PNL es similar a la posición expresada por los ciudadanos rumanos. Consideramos que las manifestaciones públicas, las marchas, los mítines, son necesarios porque sólo a nivel parlamentario es muy difícil impedir la adopción de las medidas nocivas del partido en el poder.
Por otra parte, inmune a las miserias políticas rumanas, el presidente del Tribunal de Justicia de la UE, Koen Lenaerts, ha declarado este lunes en Bucarest, que el delito de abuso de poder no debería depender de la dimensión del daño causado. Lenaearts ha invalidado de esta forma, la apreciación del diputado Iordache que había declarado que un umbral módico del perjuicio por un valor de 19.000 lei, esto es menos de 5000 euros, no molestaría a nadie.