La revolución empezó en Timişoara
Las protestas de carácter anticomunista, iniciadas el 15 de diciembre de 1989 en Timişoara, representan el momento en que estalló la revolución rumana, que determinó la caída del régimen del dictador Nicolae Ceauşescu.
Valentin Țigău, 15.12.2014, 16:17
El 16 de diciembre de 1989 estalló una protesta en Timisoara en respuesta al intento del gobierno comunista de desahucio en contra de un pastor reformado de origen húngaro. El pastor Laszlo Tokes estaba vigilado por la Securitate rumana dado que había emitido ciertas críticas hacia el régimen del dictador Nicolae Ceauşescu en la televisión nacional húngara. De hecho, las protestas estallaron el día 15 de diciembre y el día 17, en las calles de Timişoara aparecieron las fuerzas militares que habían recibido órdenes de disparar contra la población que protestaba contra el régimen de Ceauşescu y contra el comunismo.
Muchos militares se negaron a ejecutar las órdenes como prueba de solidaridad con los manifestantes, pero durante los 4 días de insurrección, casi 100 personas fueron asesinadas y algunas miles resultaron heridas. Esta tragedia anunciaba el comienzo de la caída del régimen encabezado por Ceauşescu. A través de la voluntad y con el apoyo de la población, el 20 de diciembre de 1989, Timişoara se convirtió en la primera ciudad rumana liberada del comunismo. Desde entonces, cada año se organizan actos festivos conmemorativos. Este año también participará en los actos el presidente electo de Rumanía, Klaus Iohannis.
El 17 de diciembre será un día de luto por las víctimas de la revolución rumana. Tras 25 años de la caída del comunismo, la mayoría de los rumanos declaran que, si pudieran elegir entre la democracia y el comunismo, optarían por la primera. Según indica un sondeo realizado por INSCOP Research, entre los presidentes postdecembristas destaca el nombre de Traian Băsescu, considerado por los rumanos el mejor presidente para nuestro país y cuyo mandato termina el próximo 21 de diciembre. La opción por la democracia figura en la categoría de entre 31 y 50 años de edad, (un 85%). A pesar de los problemas sociales del periodo de transición y de los fracasos evidentes del régimen democrático, la gran mayoría de los rumanos se declara a favor de la democracia, lo que en términos históricos representa el más importante logro para la nación rumana, conseguido durante los 25 años de libertad según opinan los sociólogos.
El Barómetro sobre Rumanía ha sido elaborado por INSCOP Research para el periódico Adevărul, entre el 27 de noviembre y el 2 de diciembre de 2014 sobre una muestra de 1.076 personas y es representativo para la población de más de 18 años de Rumanía, con un margen de error de los datos de más o menos el 3%.
(Trad: Simona Sirbescu)