Reacciones ante la anexión de Crimea a Rusia
Inaceptable, ilegítima e ilegal, así han calificado las instituciones oficiales y las fuerzas políticas de Rumanía la anexión por Rusia de una parte del territorio de la Ucrania vecina.
Bogdan Matei, 19.03.2014, 16:29
En Bucarest, sobre todo en un año electoral, como es 2014, en que el próximo mayo tendrán lugar las elecciones al Parlamento Europeo y en noviembre, las elecciones presidenciales, hay pocos temas que gozan del consenso entre los políticos. Un ejemplo son los acontecimientos de Ucrania, ante los cuales todas las instituciones, partidos y líderes políticos rumanos manifiestan su preocupación e indignación. Por un lado, estas reacciones se justifican por la consternación por la reanudación de las prácticas estalinistas en el siglo XXI y por otro lado, por los traumas históricos de Rumanía, que en 1940, se vio obligada tras un ultimátum, a ceder sus territorios orientales a la URSS.
La anexión de la región secesionista rusófona de Crimea por Moscú ha sido calificada por el Ministerio rumano de Exteriores (MAE) de ilegítima, porque viola los principios fundamentales del derecho internacional y la independencia, la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. De esta forma se han anulado los resultados de muchas décadas de diálogo y cooperación destinadas a la construcción de una Europa unida, sin presiones secesionistas, según señaló MAE en un comunicado. La diplomacia de Bucarest ha puesto de manifiesto su «total desacuerdo» con la acción de la Federación Rusa, sobre la cual advierte que puede generar efectos desestabilizadores en toda la región, así como el aislamiento internacional de Moscú desde el punto de vista político, económico y militar. Rumanía, según destaca el comunicado del MAE, no reconoce la anexión de la República Autónoma de Crimea, parte integrante del estado Ucrania.
Según el presidente de Rumanía, Traian Băsescu, la anexión de esta península ubicada en el sur de Ucrania muestra que la Rusia de Vladimir Putin quiere rehacer la antigua Unión Soviética. La misma preocupación es compartida por el primer ministro Victor Ponta, que ha declarado que las instituciones internacionales deben tener una reacción firme, porque, si no la tienen, Rusia podría continuar su política anexionista. Como representante de la oposición, el presidente del Partido Nacional Liberal (PNL), Crin Antonescu, opina que la anexión de una parte del territorio de Ucrania contraviene al derecho internacional, y que el así llamado referéndum para la anexión es ilegal. Se trata de graves tensiones en la relación entre la Federación Rusa y la zona euro-atlántica” , ha declarado el líder liberal.
A su vez, el primer vicepresidente del Partido Demócrata Liberal (PDL), Cătălin Predoiu, declara que Rumanía debe manifestar su firme apoyo al cumplimiento de las regulaciones del derecho internacional y que debe coordinar sus acciones con los aliados miembros de la UE y la OTAN que condenan la anexión de Crimea. En este contexto, casi todos los políticos de Bucarest han abogado a favor de acelerar los trámites para la integración a la UE de la República de Moldavia (con mayoría de rumanohablantes, un enclave entre Rumanía y Ucrania), a su vez minada por las acciones de los separatistas prorrusos de Transnistria (en el este) y la región gagausa. (en el sur).