Las nuevas leyes de educación, promulgadas
El jefe del Estado rumano, Klaus Iohannis, firmó en Bucarest los decretos que promulgan las nuevas leyes de educación. Mihai Pelin ha dado más información.
Mihai Pelin, 05.07.2023, 12:51
El presidente rumano Klaus Iohannis promulgó el martes las leyes de educación. En la ceremonia participaron numerosos representantes de las instituciones públicas, entre los que estuvieron ministros, parlamentarios y jueces constitucionales. El evento marcó el final del recorrido legislativo de los documentos en los que se plasmó el proyecto presidencial «Rumanía educada».
Klaus Iohannis ha declarado que las leyes de educación ofrecen «un marco sólido» en el que se puede construir un sistema de educación preparado para «los retos de la época», pero los dos documentos destinados a la educación preuniversitaria y universitaria no solucionarán los problemas «graves», si no se ponen en marcha. El jefe del Estado ha afirmado que es un momento con un impacto importante en el desarrollo de la sociedad rumana del futuro. Klaus Iohannis:
«Las leyes que he promulgado sientan las bases de una Rumanía conectada a las evoluciones del siglo XXI y que se beneficia plenamente de las oportunidades del futuro. Confío en su implicación y determinación, especialmente en la de los responsables de toma de decisiones presentes aquí, para transformar la Rumanía educada de un ideal en una realidad».
El presidente ha precisado que las nuevas leyes de educación se proponen solucionar las deficiencias del actual sistema de educación, al fomentar el incremento de la calidad del acto educativo y la concesión de apoyo y respeto al personal docente. Klaus Iohannis ha mencionado que se promueven las inversiones, especialmente en las zonas desfavorecidas, y se hace hincapié en la seguridad de los estudiantes.
Algunas normas mencionadas en las dos leyes han sido muy criticadas por miembros de la sociedad civil, alumnos, estudiantes y políticos. Se trata, entre otras, de la posibilidad de que los institutos organicen un examen adicional de ingreso para la mitad de las plazas disponibles, de la posibilidad de expulsar a los alumnos con faltas graves y de la limitación de los mandatos de los rectores. Estos pueden permanecer en la dirección de las universidades durante 2 mandatos (8 años). Otra norma controvertida es la introducción de la religión como asignatura optativa en el examen de Bachillerato.
Durante la ceremonia de promulgación celebrada el martes, los representantes de la USR (en la oposición) protestaron con carteles delante del Palacio de Cotroceni, la sede de la Administración Presidencial. Ellos denunciaron el fracaso del proyecto «Rumanía educada», al recordar el gran número de jóvenes que no se inscribieron para hacer este año el examen de Bachillerato. Los miembros de este partido también consideran que las nuevas leyes no representan una reforma en el sistema de educación, limitan el derecho a la educación e infringen el principio de la igualdad de derechos. El Consejo Nacional de Estudiantes y las organizaciones estudiantiles opinan que algunas normas son discriminatorias. Las leyes de educación fueron aprobadas en mayo por el Senado, órgano decisorio. Fueron impugnadas en el Tribunal Constitucional por la USR y la Fuerza de la Derecha (un grupo disidente de los liberales), pero sin éxito.
Traducción al español: Monica Tarău