A vueltas con el expediente Schengen
El ministro austriaco del Interior, Gerhard Karner, afirma en Bucarest que Rumanía va por buen camino, pero que aún le queda mucho para incorporarse a Schengen.
Roxana Vasile, 27.04.2023, 12:33
Austria es uno de los inversores extranjeros más importantes en Rumanía, con unas inversiones totales estimadas en más de 12.000 millones de euros en 2021. Sin embargo, también es el único Estado miembro de la UE que se opone abiertamente a la adhesión de Rumanía al espacio Schengen de libre circulación de personas y mercancías, lo que resulta incomprensible en Bucarest y Bruselas.
En el último Consejo JAI de ministros de Justicia e Interior, celebrado el pasado diciembre, el representante de Viena se opuso a la entrada de Rumanía en Schengen, ignorando informes que se remontan a 2011, según los cuales el país cumple todas las condiciones técnicas para formar parte del club de Estados sin controles aduaneros. Esta actitud fue tachada entonces de «lamentable e injustificada» por el presidente Klaus Iohannis. La Comisaria europea de Asuntos de Interior, Ylva Johansson, subrayó que la adhesión de Rumanía y Bulgaria a Schengen seguirá siendo su prioridad y que está decidida a conseguirlo en 2023. Y la jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo, Charles Michel, dijeron que esperaban avances.
De visita en Bucarest el miércoles de esta semana, el ministro austriaco del Interior, Gerhard Karner, echó por tierra cualquier optimismo: «Rumanía ha hecho progresos muy importantes en la lucha contra la inmigración ilegal, pero aún queda mucho camino por recorrer para proteger eficazmente las fronteras exteriores de la UE», declaró.
«La adhesión al espacio Schengen no es sólo un deseo, es un derecho», fue la respuesta de su homólogo Lucian Bode, quien opina que no es natural que Rumanía asuma sólo obligaciones, sin disfrutar de los derechos que le corresponden. De nuevo Lucian Bode:
«Le he dicho al ministro que el proceso de adhesión de Rumanía al espacio Schengen debe concluir en 2023. Tal y como nació la idea europea de un espacio sin controles en las fronteras interiores, la adhesión a Schengen no es sólo un deseo de Rumanía, sino un derecho establecido por los tratados para todos los Estados miembros. En cuanto a las decisiones tomadas hoy, hemos acordado un plan de acción para prevenir la migración ilegal y hemos firmado tres documentos de cooperación».
Los acuerdos firmados en Bucarest abarcan la lucha contra el contrabando de personas y el abuso del asilo, así como un plan de acción conjunto para combatir la migración ilegal en la ruta del Mediterráneo Oriental, que incluye el envío de agentes de policía rumanos al Ministerio Federal del Interior austriaco o el envío de agentes austriacos a la frontera rumano-húngara de Nădlac.
Versión en español: Antonio Madrid