Transnistria, motivo de preocupación
Rumanía condena las acusaciones rusas sobre la Transnistria secesionista.
Bogdan Matei, 27.02.2023, 13:22
La diplomacia rumana condena las acusaciones infundadas contenidas en el comunicado de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia sobre la región secesionista prorrusa de Transnistria, en el este de la República de Moldavia (exsoviética, mayoritariamente de habla rumana), así como la retórica amenazante y provocadora utilizada. Según un comunicado de prensa del Ministerio de Exteriores de Bucarest, la propagación intencional de información sin correspondencia en la realidad sobre el terreno representa un enfoque extremadamente peligroso, en el actual contexto de seguridad, en el que la Federación Rusa está intensificando su guerra de agresión contra Ucrania. Este intento de crear artificialmente tensiones y desestabilización es inaceptable, advierte Bucarest, que hace un llamamiento a la responsabilidad, a abandonar la retórica agresiva y provocativa, así como a abstenerse de cualquier declaración y acto que pueda afectar la estabilidad de la región y la República de Moldavia. En su manera característica, Rusia había amenazado, a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, con responder a cualquier provocación militar ucraniana en Transnistria.
También el Ministerio de Defensa ruso ha emitido un comunicado en el que afirma tener información según la cual los ucranianos están preparando una provocación en la región, en la que participarán las fuerzas armadas de Kiev, incluido el regimiento nacionalista Azov. «Como pretexto para la invasión, se planearía la organización de una supuesta ofensiva de tropas rusas en el territorio de Transnistria. Para ello, los ucranianos que participen en la acción se vestirán con el uniforme de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa», según afirma el Ministerio de Moscú. Sin embargo, la situación en la zona es tranquila, sin cambios en comparación con el período anterior, anuncia la delegación de la República de Moldavia en la Comisión Unificada de Control de Transnistria. También el Ministerio de Defensa de Chisináu menciona que no hay amenazas directas a la seguridad militar del Estado.
En la víspera, las autoridades hicieron un llamamiento a la calma e invitaron al público a seguir las fuentes oficiales y creíbles de la República de Moldavia. «Nuestras instituciones cooperan con socios extranjeros y, en caso de peligro (…), informarán inmediatamente al público», precisó el Gobierno de Chisináu. Transnistria salió de facto del control de las autoridades centrales tras un conflicto armado que se saldó con centenares de muertos y finalizó tras la intervención de las tropas de Moscú a favor de los rebeldes secesionistas en 1992, ni siquiera un año después de que Chisináu proclamara su independencia. El expresidente ruso, Boris Yeltsin, se comprometió a retirar las tropas de Transnistria desde la cumbre de la OSCE de Estambul de 1999. Allí aún quedarían unos 1.500 soldados e importantes arsenales rusos. Según analistas, la secesión de Transnistria inauguró el escenario para la posterior separación, respaldada por Rusia, de Osetia del Sur y Abjasia con respecto a Georgia y de Dombás con respecto a Ucrania.