Refuerzo sísmico en Rumanía
Los devastadores efectos del terremoto de Turquía vuelven a poner sobre el tapete la cuestión del refuerzo estructural de los edificios con riesgo sísmico en Rumanía.
Ştefan Stoica, 08.02.2023, 14:07
Como ocurre siempre en estas situaciones, la tragedia turco-siria, provocada por un devastador terremoto, ha traído a la memoria los dramáticos momentos que vivió Rumanía, especialmente Bucarest y su territorio extracarpático, tras el seísmo del 4 de marzo de 1977. En adelante se van a plantear preguntas sobre la posibilidad de que se produzca un terremoto de magnitud 7 o superior en un futuro próximo y sobre cómo están preparadas las autoridades para hacer frente a sus consecuencias.
El sismólogo Mihail Diaconescu, del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo en Física de la Tierra (INPF) explicó en la radio pública que el primer seísmo, de magnitud 7,8, se produjo cerca de un punto de unión entre tres placas litosféricas, la placa arábiga, la placa africana y el bloque tectónico de Anatolia, y que la zona no puede compararse con la zona sísmica de Vrancea, en el sureste de Rumanía, que genera los movimientos sísmicos más importantes de nuestro país. Aunque no haya riesgo de movimientos sísmicos similares a los de Turquía, no puede excluirse el riesgo de que se produzca un terremoto de magnitud similar. Sin embargo, Vrancea no muestra actualmente ningún signo de «nerviosismo» sísmico.
Mihail Diaconescu: «Los movimientos sísmicos no son similares, quizá solo en magnitud. En Rumanía, según el catálogo del INFP, hubo un terremoto de 7,9 grados de magnitud en el siglo XIX, la magnitud máxima que podría producir Vrancea. Pero sea como fuere, tratándose de un terremoto histórico, puede estar ligeramente sobrevalorado. No veo que Vrancea muestre un comportamiento dudoso, dentro de los límites de sismicidad de fondo de la zona». La trágica experiencia de Turquía puede enseñarnos que toda construcción debe respetar un código, considera el sismólogo Mihail Diaconescu.
Según el Ministerio de Desarrollo, en Rumanía hay unos 2 700 edificios de alto y medio riesgo sísmico, la mayoría en Bucarest. Sin embargo, en los últimos 15 años, ni siquiera un solo municipio ha tomado medidas para rehabilitar edificios, subrayó Toni Greblă, prefecto de Bucarest: «Es por la indolencia de determinados responsables de la administración que no preparan a fondo los proyectos para poder iniciar la rehabilitación y refuerzo antisísmico de los edificios. En los últimos 15 años, ningún municipio, especialmente la capital, Bucarest, puede decir que no ha tenido dinero para la rehabilitación de edificios. Año tras año, los fondos del Ministerio de Fomento, los fondos europeos se quedan sin gastar, porque no somos capaces de trabajar para llevar a cabo proyectos de refuerzo antisísmico y ponerlos en práctica».
Según el ministro de Desarrollo, Cseke Attila, hay más de 200 objetivos propuestos por autoridades locales, edificios públicos y bloques de pisos, en el marco del nuevo programa nacional de refuerzo de edificios de alto riesgo sísmico. El programa incluye no sólo edificios de alto riesgo sísmico sino también edificios de medio riesgo sísmico muy similares en términos de riesgo de exposición a un terremoto. En el programa anterior, entre 1994 y 2021, solo se rehabilitaron 28 edificios. En caso de un terremoto similar al de 1977, 23.000 edificios de Bucarest corren el riesgo de sufrir daños importantes, advierten los expertos.
Versión en español: Victoria Sepciu