El Gobierno asegura que hay recursos
Rumanía tendrá gas y cereales para el consumo, asegura el primer ministro Nicolae Ciucă
Ştefan Stoica, 22.07.2022, 11:13
El petróleo es cuestión de dinero, el gas es cuestión de geopolítica, declaraba recientemente un experto en asuntos energéticos, refiriéndose a las acciones de Rusia en su conflicto abierto — de índole diplomática, económica y, esencialmente, ideológica — con el Occidente.
Moscú ha retomado la entrega de gas por uno de los conductos utilizados para suministrar este recurso a Europa, pero Europa ha comprendido que ya no puede contar con el gas ruso y, al menos para una mayoría cualificada de los estados de la Unión, tampoco es ético hacerlo, tras la invasión rusa en Ucrania. Ésta es la razón por la cual la UE está intentando, por un lado, diversificar sus fuentes de abastecimiento y, por el otro, convencer a los estados miembros de que utilicen la energía de manera racional y ahorren energía para el invierno. La perspectiva de reducir el consumo de gas trae recuerdos dolorosos a los rumanos que vivieron la pesadilla de los últimos años de la dictadura comunista, cuando el frío en las viviendas estaba casi generalizado. Quizás sea ésta la razón por la cual los gobernantes abordan este asunto delicado con optimismo, uno que se sustenta, no obstante, en cifras.
El primer ministro Nicolae Ciucă ha declarado que, en la actualidad, las autoridades no temen que Rumanía no disponga del gas necesario para el próximo invierno. En los depósitos ya se ha rebasado el nivel de 1,6 mil millones de metros cúbicos y el plan prevé alcanzar el 80% de la capacidad de almacenamiento antes del próximo 1 de noviembre, ha especificado el jefe del Gobierno:
“Nosotros habríamos debido llegar al 46% hasta el 1 de agosto, al 57% hasta el 1 de septiembre, al 66%, si no me equivoco, hasta el 1 de octubre, y al 80% el 1 de noviembre. Las cifras actuales muestran que hemos superado los porcentajes asumidos, puesto que, a finales de la semana pasada, había 200 millones de metros cúbicos más en comparación con lo que teníamos almacenado en el período similar del año pasado. Por lo tanto, en este momento no hay ningún tipo de preocupación por la posibilidad de que Rumanía no disponga del gas necesario para el invierno 2022 — 2023.”
La medida de reducir el consumo, exigida por la Unión Europea, se ha tomado por cautela, considera Nicolae Ciucă.
Lamentablemente, la sequía crónica ha generado otro reto importante, al que los gobernantes se ven obligados a responder: qué pasa con los cultivos de cereales. El primer ministro ha asegurado, sin embargo, que hay suficiente trigo para el consumo interno e incluso para la exportación. Tampoco hay por qué preocuparse en lo relativo a los cultivos de maíz y girasol, afirma Nicolae Ciucă:
“Los cultivos de otoño se cosechan ahora y las cifras que hemos recibido muestran meridianamente que tenemos suficiente trigo para el consumo propio, para la siembra, y también hay trigo para exportar. En lo que atañe a los cultivos de maíz y girasol, no hay motivos de preocupación, ya que, según las estadísticas, contamos con cantidades suficientes para tener los alimentos garantizados.”
Es la tarea de cada gobierno preocuparse por garantizarle a la ciudadanía del país los alimentos, la calefacción y la energía durante el invierno, y es lo que estamos haciendo en la actualidad, ha tranquilizado el primer ministro a sus conciudadanos.
Versión en español: Gabriela Ristea