Las prioridades del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia
Transición verde, digitalización, sanidad, educación y reformas en el campo fiscal o en el sistema de pensiones son los pilares en los que se basa el Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia.
Roxana Vasile, 03.06.2021, 13:03
El Gobierno de coalición de centro-derecha de Rumanía presentó públicamente el 2 de junio el Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia, alrededor de 1.200 páginas enviadas a la Comisión Europea con las medidas a partir de las cuales Rumanía recibiría unos 29.000 millones de euros. El dinero, en forma de subvenciones y préstamos, forma parte de un plan amplio de unos 672.000 millones de euros, pensado en Bruselas, para que todos los países miembros de la Unión Europea puedan superar las consecuencias económicas de la pandemia de COVID-19. De los 29.000 millones de euros que le corresponderían a Rumanía, las autoridades desean construir en 5 años más de 400 kilómetros de carretera, centenares de escuelas y guarderías y renovar decenas de hospitales. De hecho, los transportes, la educación y la sanidad recibirán el mayor número de fondos. Tampoco faltan en el Plan proyectos sobre el medio ambiente, forestaciones y una mejor gestión de los desechos.
El primer ministro Florin Cîțu ha precisado que los préstamos que Rumanía recibirá a través del PNRR serán utilizados sólo para las inversiones:
”De todas formas nosotros solíamos tomar prestado para invertir en Rumanía. Necesitamos carreteras, hospitales, escuelas y la tasa de interés de los préstamos que recibiremos a través del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia es muy reducida, inferior al 1%. La misma tasa se aplicará a los préstamos tomados por Alemania, España o Italia. Por lo tanto, para Rumanía es una ventaja poder recibir este dinero pagando una tasa de interés tan reducida para poder invertir.”
Los vice primeros ministros Dan Barna y Kelemen Hunor han subrayado que varios sectores clave van a ser cambiados significativamente y que todas las comunidades, indistintamente de la región, serán apoyadas de manera equilibrada y correcta.
Por otra parte, Lucian Romaşcanu, portavoz del Partido Social Demócrata, en la oposición, afirma que los proyectos incluidos en el PNRR provocarán nuevos desequilibrios:
“No tenemos nada para el sector ferroviario, el riego o el gas natural, sectores que condenan a Rumanía al subdesarrollo. Tendremos una Rumanía que se desarrollará de manera desequilibrada aunque tenemos la posibilidad de cambiar el país con este dinero.”
El Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia también contiene una serie de reformas en el sector de las pensiones, la justicia, las empresas estatales y los salarios del sistema público. Mientras que el Gobierno afirma que desea recalcular todas las pensiones y aumentar las pensiones pequeñas, el Partido Social Demócrata habla de aumentar la edad de jubilación, la austeridad y la congelación de los ingresos. Los socialdemócratas aprecian que la pobreza de los rumanos y la disminución del nivel de vida son las únicas certezas del PNRR.
Según el ministro de Inversiones y Proyectos Europeos, Cristian Ghinea, en el próximo período Bucarest espera de Bruselas la evaluación oficial del PNRR y luego su aprobación final. A partir de ese momento, Rumanía decidirá cómo aplicarlo.