El Consejo Supremo de Defensa del País: el mar Negro y Afganistán a debate
El comportamiento cada vez más impredecible de Rusia y la retirada de las tropas rumanas de Afganistán han dominado la reunión del Consejo Supremo de Defensa del País organizado este martes.
Bogdan Matei, 28.04.2021, 13:26
Definido frecuentemente como una cúpula de las instituciones que aseguran la seguridad nacional y el orden público, el Consejo Supremo de Defensa del País (CSAT, por sus siglas en rumano) ha examinado este martes, en una reunión convocada por el presidente Klaus Iohannis, los actuales expedientes ardientes. Como base de la OTAN en el flanco este, Rumanía se ha declarado preocupada por el reciente despliegue de las tropas rusas en la frontera oriental de Ucrania. Aunque Moscú haya anunciado que, una vez acabadas las maniobras, estas tropas vuelven a los cuarteles, “las autoridades rumanas siguen prestando atención y continuarán monitoreando esta movilización injustificada alrededor de Ucrania”. El Consejo Supremo de Defensa del País considera que la retirada “no cambia en absoluto la necesidad de continuar analizando las causas de esta tensa situación y de identificar medidas para calmar la situación, así como para evitar en el futuro situaciones similares”. En este contexto, Rumanía vuelve a afirmar que es necesario respetar la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, país vecino, en sus fronteras reconocidas internacionalmente. En una perspectiva más amplia, nuestro país aboga por solucionar los conflictos prolongados alrededor del mar Negro, y la diplomacia rumana ha creado algunas iniciativas a nivel de la Unión Europea, según se menciona en un comunicado de la Administración Presidencial enviado después de la reunión del Consejo Superior de Defensa del País.
Los analistas destacan que todos estos conflictos tienen un punto común: las injerencias de Rusia en las antiguas repúblicas soviéticas, a las que todavía considera parte de su esfera de influencia. Este escenario fue inaugurado en Transnistria (este), que ya no está de facto bajo el control de las autoridades centrales de la República de Moldavia (donde la mayoría de la población habla el rumano) desde 1992, después de un conflicto armado en el que murieron centenares de personas y que acabó tras la intervención de las tropas rusas del lado de los rebeldes separatistas. Continuó en Georgia, donde ya hay un proyecto sobre la creación de un espacio económico común entre Rusia y la región secesionista de Abjasia. Con el apoyo de Moscú, ésta y Osetia del Sur se separaron del Estado georgiano, y en 2008, Rusia reconoció la independencia de Abjasia, proclamada unilateralmente. En 2014, todo culminó con la anexión de la península de Crimea y con la alimentación de la rebelión armada en el este de Ucrania.
También este martes, el Consejo Supremo de Defensa del País ha anunciado que Rumanía retirará sus fuerzas de Afganistán, en coordinación con los demás miembros de la OTAN, a partir del 1 de mayo. Los 615 militares y las más de 80 toneladas de material y de elementos de logística volverán al país en aviones militares nacionales y de la coalición. En la misión antiterrorista en Afganistán, inaugurada poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 de Estados Unidos, 27 militares del Ejército rumano murieron ejerciendo su misión. A ellos y a los demás héroes, las autoridades rumanas rindieron homenaje el 27 de abril, cuando se celebra anualmente el Día Nacional de los Veteranos de Guerra.
Versión española: Monica Tarău