El estado de alerta prolongado nuevamente
En el contexto de la rápida propagación de la cepa ómicron del coronavirus, que se transmite con mucha más facilidad, el uso de la mascarilla de protección vuelve a ser obligatorio a partir del sábado en todos los espacios cerrados y abiertos de Rumanía, una vez con la prolongación del estado de alerta por parte del Gobierno. Además, ya no se permite el uso de mascarillas textiles o de plástico debido a su baja eficacia. El doctor Valeriu Gheorghiţă ha llamado la atención sobre la forma incorrecta en que a menudo se usa la mascarilla, sin cubrir adecuadamente la nariz y la boca.
Daniela Budu, 07.01.2022, 10:42
En el contexto de la rápida propagación de la cepa ómicron del coronavirus, que se transmite con mucha más facilidad, el uso de la mascarilla de protección vuelve a ser obligatorio a partir del sábado en todos los espacios cerrados y abiertos de Rumanía, una vez con la prolongación del estado de alerta por parte del Gobierno. Además, ya no se permite el uso de mascarillas textiles o de plástico debido a su baja eficacia. El doctor Valeriu Gheorghiţă ha llamado la atención sobre la forma incorrecta en que a menudo se usa la mascarilla, sin cubrir adecuadamente la nariz y la boca.
Valeriu Gheorghiţă:
“Doblaría esta recomendación de usar una mascarilla médica del uso correcto de la mascarilla porque tener una buena mascarilla, pero sin usarla correctamente resulta inútil. Las máscaras quirúrgicas de tres capas deben reemplazarse cada cuatro horas. Las mascarillas FFP2 se pueden llevar durante más tiempo porque tienen una filtración mucho más rigurosa”.
Además de la obligatoriedad de llevar mascarilla, habrá limitaciones en la actividad de los restaurantes, en la organización de espectáculos y eventos deportivos, en función de la incidencia de cada localidad. Las tiendas y restaurantes estarán abiertos hasta las 22:00. Mientras tanto, para la quinta ola de la pandemia, las autoridades están decidiendo dónde se instalarán centros de evaluación y tratamiento anti-COVID ambulatorios, una medida destinada a evitar las aglomeraciones de los hospitales, tal como sucedió en otoño.
Según la doctora Beatrice Mahler, directora del Instituto Marius Nasta de la capital, estos centros serán de gran ayuda no sólo para aliviar la presión sobre los hospitales, sino también para curar rápidamente a los pacientes.
Beatrice Mahler:
“En este momento, tratamos la quinta ola desde la perspectiva de una terapia que se puede administrar desde los primeros días de la enfermedad. Es importante que estos pacientes con riesgo de desarrollar una forma grave, mayores de 65 años o pacientes con alguna enfermedad crónica en tratamiento, tengan un lugar donde presentarse en los primeros días tras el debut. Eso sí, no debemos descartar la presencia de pacientes sintomáticos y con sospecha de infección por el SARS-CoV-2. Éllos también pueden acudir a estos centros para diagnóstico”.
Las autoridades recomiendan insistentemente la vacunación, ya que reduce significativamente el riesgo de desarrollar una forma grave de COVID-19 y el riesgo de muerte. Según los expertos, los vacunados que recibieron la dosis de refuerzo o los que pasaron la enfermedad son las categorías más protegidas en la perspectiva de la nueva ola de la pandemia. Sin embargo, los rumanos no tienen prisa por vacunarse, aunque la cantidad de infecciones es cuatro veces mayor que hace una semana, siendo la cantidad de vacunas administrada diariamente bastante reducida, de algunos miles. Sin embargo, quienes ya recibieron la pauta completa de vacunación, deciden hacer la llamada dosis de refuerzo con más facilidad.