La industria rumana se reorganiza
Tanto la industria nacional de defensa como las empresas privadas de Rumanía se han reorganizado para producir materiales necesarios para prevenir y combatir la pandemia COVID-19.
Daniela Budu, 08.04.2020, 12:36
En Rumanía las empresas privadas y estatales están uniendo fuerzas para combatir una de las peores pandemias que ha enfrentado la humanidad y producir materiales sanitarios esenciales. El ministro de Economía Virgil Popescu ha anunciado que durante este período varias empresas están preparando líneas de producción especiales para este tipo de equipos y que, a partir de la próxima semana, en Rumanía se producirán un millón de máscaras quirúrgicas al día.
Al mismo tiempo, la industria nacional de defensa ha desarrollado y realizado un escáner térmico 100% rumano. Según el Ministerio de Economía, este producto llamado «CONDOR» se puede utilizar para controlar el acceso a áreas con alto flujo humano y reducir el tiempo de evaluación del estado febril en lugares como aeropuertos, metro, fronteras, hospitales o instituciones públicas. Recordamos que la industria nacional de defensa ya produce cápsulas, utilizadas para el transporte seguro de las personas contaminadas. Virgil Popescu ha dicho asimismo que el Ministerio de Defensa ha desarrollado un método rápido de certificación para las empresas interesadas en producir nuevos dispositivos de ventilación mecánica, necesarios para el tratamiento de pacientes con formas graves de COVID-19.
Recientemente, Virgil Popescu ha llamado la atención sobre el hecho de que tanto Rumanía como toda Europa dependen de las importaciones procedentes de China y ha subrayado que, cuando acabe esta crisis sanitaria, la economía rumana se reiniciará y será necesario reorganizarla por completo para que los materiales esenciales en tales situaciones se produzcan en el país. En este contexto, el ministro se ha referido a un programa de microindustrialización que ha sido modificado y orientado hacia la producción de materiales sanitarios. Ha anunciado también subvenciones por valor de 65 millones de lei (unos 13,5 millones de euros) destinadas a 325 empresas que quieren reorientar su actividad hacia la producción de materiales sanitarios.
En una reunión con representantes de los fabricantes y distribuidores de la industria farmacéutica, el primer ministro Ludovic Orban ha reiterado que uno de los objetivos del Gobierno durante este período es estimular la producción interna de medicamentos, biocidas y equipos médicos para reducir el riesgo de síncope en el suministro durante las situaciones de crisis. Los debates se han centrado en las medidas que se imponen para garantizar la existencia y el suministro continuo de medicamentos tanto para los pacientes infectados con el nuevo coronavirus como para los pacientes crónicos, así como en los materiales y equipos sanitarios necesarios para proteger al personal médico.
El primer ministro ha acogido con beneplácito el anuncio de la compañía estatal Antibióticos Iasi sobre la reanudación de la producción de dos medicamentos muy solicitados por el mercado, el paracetamol y el novocalmin. Ludovic Orban ha agradecido asimismo a las empresas farmacéuticas las donaciones y el apoyo ofrecidos durante este período y ha asegurado que se está trabajando en la «simplificación y flexibilidad» de la legislación para que «los gestos de solidaridad no se vean obstaculizados por medidas burocráticas».