Medidas drásticas contra el nuevo coronavirus
La alarmante propagación del coronavirus en Europa hace que las autoridades rumanas tomen medidas severas de prevención.
Roxana Vasile, 09.03.2020, 14:12
La situación generada por el nuevo coronavirus está, por el momento, bajo control en Rumanía. El número de personas que ya están enfermas es pequeño, y los casos de infección reportados regularmente por las autoridades de Bucarest son relativamente esporádicos. En una entrevista para la prensa central, el presidente de la Sociedad Rumana de Microbiología, Alexandru Rafila, advierte, sin embargo, que, sin prestar mayor atención, una espiral indeseable de contaminación, similar a la de Italia, gravemente afectada, podría repetirse en cualquier país.
Según el médico, hay tres tipos de transmisión del virus: desde la importación, como es el caso ahora en Rumanía, hasta la transmisión local y amplia, en la comunidad, cuando la persona que transmite el virus es asintomática y, en la práctica, las autoridades ya no pueden controlar su transmisión. A partir de aquí, es importante que, además de las medidas coercitivas tomadas por las autoridades, cada ciudadano sepa que tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros y, como resultado, debe cumplir estrictamente con las recomendaciones formuladas, de lo contrario puede poner en peligro a su propia familia. Por esta razón, las autoridades en Bucarest han prohibido, hasta finales de este mes, eventos públicos o privados en espacios abiertos o cerrados con más de 1.000 participantes.
La medida es obligatoria a nivel nacional para todas las empresas públicas y privadas y no está sujeta a negociación ni tampoco a excepciones. Así, los partidos de fútbol se llevarán a cabo sin espectadores, y las actividades culturales se han pospuesto. Los acontecimientos para los cuales se estima la participación de menos de 1.000 personas solo se pueden organizar después de obtener la aprobación por parte de las Direcciones de Sanidad Pública locales.
En Bucarest, en el metro, donde hay un tráfico diario de más de 600.000 personas, el número máximo de trenes está en circulación, el tiempo de espera se reduce al mínimo posible, la desinfección se realiza cada 12 horas y se adjuntan carteles informativos y educativos para prevenir la infección por coronavirus.
Al mismo tiempo, se aconseja a los rumanos en las zonas afectadas en el extranjero que no regresen al país. Los motivos han sido explicados por el secretario de Estado del Ministerio del Interior, Raed Arafat:
«Si ya se encuentran en las áreas afectadas y vienen aquí, a sus abuelos, padres, personas mayores, y presentan el riesgo de infectarse y transmitir el virus a sus familiares, pondrán en peligro sus vidas. Por esta razón recomendamos evitar y limitar al máximo los viajes desde las áreas afectadas al país».
Es más, Rumanía ha decidido suspender, durante dos semanas a partir de este lunes por la tarde, los vuelos hacia y desde Italia, donde vive la mayor comunidad de rumanos de la diáspora. El ministro interino del Interior, Marcel Vela:
«La suspensión de vuelos de los operadores aéreos a Italia y desde Italia a Rumanía se aplicará para todos los aeropuertos del país, a partir del 9 de marzo de 2020 a las 12:00, hora de Rumanía, hasta el 23 de marzo de 2020, a las 12:00, hora de Rumanía».
Además, los operadores aéreos tienen la obligación de comunicar a los ciudadanos que quieran viajar desde Italia, China, Irán o Corea del Sur a Rumanía, con una llamada, el hecho de que serán puestos en cuarentena en el territorio rumano y que deberán asumir esta responsabilidad, firmando una declaración antes de subir a bordo de la aeronave. Los que provienen de los cuatro países mencionados y que ingresan al país a través de puntos fronterizos terrestres están obligados a permanecer en cuarentena dentro del distrito fronterizo o en aislamiento en sus hogares. Aquellos que no cumplan con las condiciones de aislamiento para la prevención de la infección con el nuevo coronavirus pueden recibir multas de hasta 20.000 lei (el equivalente a 4.000 euros). Al mismo tiempo, las personas que lleguen a Rumanía y no declaren correctamente el país del que proceden serán sancionadas penalmente por falsedad de declaraciones.
(Versión española: Simona Sarbescu)