Ludovic Orban, propuesto de nuevo para el cargo de primer ministro
En Bucarest reina la incertidumbre después de que otro Gobierno haya sido destituido mediante moción de censura.
Bogdan Matei, 07.02.2020, 13:49
El presidente Klaus Iohannis ha propuesto también al líder del PNL, Ludovic Orban, para formar un nuevo gabinete, movimiento anticipado por muchos comentaristas. El gabinete liderado por Orban cayó el pasado miércoles mediante una moción de censura presentada por el PSD y la Unión Demócrata de los Húngaros de Rumanía tras la decisión del Ejecutivo de asumir la responsabilidad por la elección de los alcaldes en dos vueltas. Conforme a la Constitución, el primer ministro designado tiene a su disposición 10 días para presentar su equipo al Parlamento. Después de otros 15 días, el Legislativo bicameral debe reunirse en una junta común y votar el Gobierno de Orban. Si los senadores y diputados lo rechazan, el jefe del Estado puede hacer otra propuesta y su rechazo equivaldría al inicio de las elecciones anticipadas. Sería una novedad absoluta en los tres decenios de democracia postcomunista porque, por más inestable que fuera el escenario político desde 1990 hasta el presente, nunca se ha llegado a la disolución del Parlamento. Según afirman los expertos, semejante final tampoco es seguro. El 21 de junio sería la fecha límite para las elecciones anticipadas porque a partir de esa fecha el actual Legislativo entra en los últimos 6 meses de mandato y ya no puede ser disuelto. Después de las consultas del jueves con los partidos parlamentarios, el presidente ha repetido que su primera opción es la organización de elecciones parlamentarias anticipadas. Idea compartida también por el PNL, la USR y la UDHR, pero desaprobada por los demás partidos políticos. Los sondeos sobre intención de voto indican que el PNL es el partido más popular, con un 47% de las opciones mientras que el antiguo poder socialdemócrata lograría tan sólo el 20%. Junto con sus socios de PLUS, la USR rondaría un 15%, la UDHR un poco más del umbral electoral del 5% mientras que el Partido Movimiento Popular, la ALDE y Pro Rumanía se situarían por debajo del umbral electoral.
Más allá de cálculos y procedimientos, el politólogo Cristian Parvulescu ha señalado que “Rumanía se encuentra en una fase de inestabilidad política, hemos tenido cuatro Gobiernos en tres años y medio, las coaliciones parlamentarias se rompieron.” Aún más, desde el año 2012 en Bucarest se sucedieron nueve Gobiernos, de derecha y de izquierda, monocolores o de coalición, coloreados ideológicamente o tecnócratas. En una entrevista para Radio Rumanía, el profesor Parvulescu ha afirmado que hará falta una reforma constitucional que asegure más coherencia tanto a la administración como a las instituciones políticas. Semejante terapia sería necesaria, según piensan los comentaristas, también para rehabilitar la imagen de la clase política en su conjunto, en los ojos de un electorado cada vez más cansado y aburrido de los juegos políticos secretos, de la inestabilidad crónica y de administraciones que van y vienen sin dejar nada notable atrás.