Cómo han votado los rumanos
Los sociólogos analizan el perfil de los rumanos que han acudido a las urnas para la final de las elecciones presidenciales el pasado domingo.
Bogdan Matei, 26.11.2019, 14:34
El resultado final es implacable: este domingo, en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, el actual jefe del Estado, Klaus Iohannis, apoyado por el PNL, en el Gobierno, ha obtenido casi dos tercios de los votos, casi el doble en comparación con la ex primera ministra socialdemócrata Viorica Dăncilă. En tres décadas de democracia poscomunista, es la puntuación más baja en la ronda decisiva obtenida por un candidato de izquierda. Además, la participación, de poco más de la mitad del número total de votantes en las listas, es la más baja para una final de elecciones presidenciales.
Más allá de las principales estadísticas, el Instituto Rumano de Evaluación y Estrategia (IRES), un grupo de expertos independiente que se encarga del estudio de los problemas actuales, tanto en el país como en el extranjero, ha intentado radiografiar el perfil sociológico de los rumanos que acudieron a las urnas el pasado domingo. Los datos del IRES muestran un equilibrio perfecto entre votantes masculinos y femeninos en el caso de Iohannis, de un 50% para cada categoría, mientras que Viorica Dăncilă ha obtenido más votos de mujeres que de hombres, (54 en comparación con 46). Desde el punto de vista de la edad, los votantes de Klaus Iohannis se distribuyen de manera uniforme, casi la mitad (49%) en 45 años, y el resto está por debajo de este umbral. En el caso de Viorica Dăncilă, el 78% supera el umbral de 45 años.
Desde el punto de vista de los estudios, el porcentaje más alto proviene, en el caso de ambos candidatos, de votantes con educación media (55-56). En contraste, el 34% de los votantes de Iohannis tienen educación superior, en comparación con solo el 17 por ciento en el caso de Viorica Dăncilă.
Una gran discrepancia aparece en el capítulo sobre el estado ocupacional. Solo un tercio de los votantes de Klaus Iohannis se han declarado jubilados o casados/sin ocupación, a diferencia de los votantes de Viorica Dăncilă, en los cuales los porcentajes fueron los siguientes: jubilado (50%), empleado (32%), casado / sin ocupación (11%), independiente (4%).
Desde el punto de vista del entorno de residencia, la mayoría de los votantes de Klaus Iohannis provenían del área urbana (62%) y solo el 38% del área rural, mientras que en el caso de Viorica Dăncilă la proporción es más equilibrada (52 a 48).
En cuanto a la distribución por regiones, existe un fuerte desequilibrio en el caso de los votantes de la candidata del PSD, que ha obtenido un 53% de los votos en el sur del país, Oltenia y Muntenia, de donde es oriunda Dăncilă, contra el 44 por ciento obtenido por Iohannis.
Transilvania (centro) sigue siendo un respaldo sólido para el presidente, que ha obtenido en su región natal el 37% de los votos contra el 25% en el caso de Viorica Dăncilă. En el caso de Moldavia (este), la situación es más equilibrada: 19% para Iohannis y 22% para Dăncilă. Todas estas cifras indican, según los analistas, la existencia de facto de varias Rumanías, separadas por edad, estudios, ingresos o regiones históricas. Por otro lado, aunque igualmente diversa desde el punto de vista social, la diáspora rumana prácticamente plebiscitó al presidente Iohannnis, votado por más del 90% de los casi un millón de rumanos que han acudido a las urnas en el extranjero el pasado domingo.
(Versión española: Simona Sarbescu)