Sanciones en los partidos de oposición
El voto de investidura que ha recibido el Gobierno liberal liderado por Ludovic Orban ha afectado a la izquierda rumana.
Ştefan Stoica, 06.11.2019, 15:02
El PSD ha perdido el poder y ha entrado frágil en la última curva de las elecciones presidenciales. El hecho de que ha habido parlamentarios socialdemócratas que han contribuido mediante su voto tanto a la destitución de su propio Gobierno como a la instalación del nuevo Ejecutivo liberal, aunque corrieran el riesgo de ser excluidos, habla por sí mismo del estado de ánimo en el partido. La depuración que seguirá no tiene el objetivo de calmar los ánimos, y una posible pérdida de la competición para ocupar el cargo más importante aumentará los problemas. Pero el PSD ya pasó por otras tensiones de este tipo, algunas ellas incluso produjeron escisiones, y el partido resistió.
La más reciente formación de centroizquierda, el PRO Rumanía, está también en una situación difícil. Cabe destacar que este partido fue creado por aquellos que salieron del PSD a causa de la manera discrecional en la que fue dirigido por el exlíder Liviu Dragnea, encarcelado el pasado mes de mayo por corrupción. La formación del ex primer ministro Victor Ponta votó a favor de la moción de censura contra el gabinete de Viorica Dăncilă, pero después decidió no votar a favor del Gobierno liberal por razones ideológicas. Sin embargo, algunos parlamentarios miembros del PRO Rumanía, entre los que estuvieron los exministros Daniel Constantin y Sorin Câmpeanu, apoyaron al nuevo gabinete, invocando la necesidad de que el país fuera gobernado, lo que ha atraído duras sanciones. El PRO Rumanía ha decidido que los diputados que votaron a favor de la investidura del Gobierno Orban sean despedidos de los cargos de coordinadores provinciales y pierdan el apoyo político a todos los cargos que tienen en el Parlamento. La integridad moral es uno de los valores que todos los miembros del PRO Rumanía deben asumir, y la decisión de sancionar a los siete diputados es una consecuencia normal de la pérdida de la confianza con la que fueron investidos, ha motivado la dirección.
Daniel Constantin ha reaccionado anunciando que saldrá del partido. El ex primer ministro Mihai Tudose, actualmente europarlamentario, ha reprochado a Ponta que sancione el delito de opinión y ha tenido un ataque autoritario, lo que haría que se asemejara estilísticamente a Liviu Dragnea. Tudose ha sugerido a Ponta que asuma el fracaso de las negociaciones que ha desarrollado últimamente y renuncie a la dirección del partido.
Versión española: Monica Tarău