Apertura del curso académico 2019-2020
Varias universidades en Bucarest y otras ciudades de Rumanía han organizado festividades para abrir el año académico.
Corina Cristea, 30.09.2019, 14:14
Para casi medio millón de jóvenes en Rumanía, este período está marcado por el comienzo de un nuevo año docente. Se trata de alrededor de 450.000 estudiantes, que han optado por acudir a los cursos de una de las 54 universidades públicas y 47 privadas del país. Entre las universidades de la capital u otras ciudades de Rumanía que han organizado festividades a principios de esta semana, figuran la Universidad de Bucarest, la Academia de Estudios Económicos y varias facultades dentro de la Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Administrativas.
En la Universidad Babeş Bolyai de Cluj Napoca (centro), fundada hace 100 años, también ha acudido a la ceremonia de apertura el presidente Klaus Iohannis. En esta ocasión, el jefe del Estado ha decidido condecorar las seis universidades públicas de la ciudad, que, según un comunicado de la Administración Presidencial, han tenido una aportación especial en la comunidad, contribuyendo a su desarrollo en el espíritu del multiculturalismo, y que representan un pilar importante en la preservación y la promoción de los valores y la cultura nacional.
Ioan Aurel Pop, el rector de la Universidad Babeş Bolyai y presidente de la Academia rumana, ha hablado en Radio Rumanía sobre el valor de las instituciones de enseñanza en nuestro país, destacando que la institución de educación superior de Cluj figura entre las 1000 mejores universidades del mundo.
Ioan Aurel Pop:
“Se trata de universidades prestigiosas y de alto nivel. La condición es que estén apoyadas por el Gobierno, por los factores políticos, porque la escuela no se puede hacer sin presupuestos generosos. Cuando se realizó el top 500, había alrededor de 10.000 universidades en el mundo y ahora hay casi 30.000 que participan en la clasificación, por lo tanto, estar en el top 1000 ahora es incluso mejor que figurar en el top 500. Esto significa que de las universidades de Rumanía, algunas tienen el mismo nivel que las universidades de Polonia, Hungría, Eslovenia o Eslovaquia, es decir, en nuestra zona de Europa, que en los años del comunismo sufrió un proceso de aislamiento internacional. Sin embargo, los esfuerzos deben unirse, deben ser permanentes, porque el deber de un profesor es capacitar primero a los estudiantes en la investigación científica, transmitir los conocimientos más recientes en sus campos de actividad y esta dinámica internacional, el intercambio de valores nos ayuda mucho.»
El próximo martes también acudirán a la apertura del nuevo año docente los estudiantes de la Universidad de Medicina y Farmacia «Carol Davila» de la capital, mientras que otras universidades, como la Politécnica de Bucarest, inauguraron el curso hace una semana.
(Versión española: S. Sarbescu)