El caso de Caracal
Los rumanos han quedado estupefactos por los asesinatos ocurridos en la ciudad de Caracal.
Roxana Vasile, 29.07.2019, 13:32
Gheorghe Dinca, un mecánico sexagenario de la pequeña ciudad de Caracal ubicada en el sur de Rumanía, finalmente ha reconocido este domingo los hechos. El hombre secuestró, violó y mató a dos adolescentes. Alexandra, de 15 años de edad, desapareció el pasado miércoles. El jueves, la menor logró llamar tres veces al número de emergencias 112 denunciando su rapto y violación, pero la policía tardó en encontrar el lugar del que llamaba. 19 horas después de recibir las llamadas, las autoridades lograron localizar la fuente de las llamadas y obtuvieron una orden de registro, aunque no era legalmente necesaria. Tras conseguir esta orden esperaron durante varias horas para entrar al local.
Gheorghe Dinca ha confesado haber matado a Alexandra inmediatamente después de darse cuenta de que la chica había llamado al número de emergencias para pedir ayuda. Las pruebas indican que después de matarla, el hombre quemó su cuerpo. En el patio de la casa, en un barril donde quemó el cuerpo, los policías encontraron restos humanos calcinados así como joyas que pertenecieron a la chica.
Por una situación similar pasó Luiza Mihaela Melencu, una joven de 18 años de edad, que desapareció el pasado mes de abril. Acusado inicialmente de trata de menores y violación, Gheorghe Dinca también es acusado de homicidio con agravantes. Los especialistas en psiquiatría advierten de que el hombre podría ser un asesino en serie y es posible que haya cometido otros crímenes en el pasado. Por eso, la policía sigue trabajando en el expediente de Caracal.
El viernes pasado, según datos publicados por la prensa de Rumanía, numerosas personas de la ciudad de Caracal, vecinos aterrados y otros, salieron a protestar frente a la casa del sospechoso y han exigido que se castigue a los responsables. Varias protestas han tenido lugar también en Bucarest y otras ciudades grandes de Rumanía.
El jefe de la Policía de Rumanía, algunos jefes de la Policía local y el prefecto del distrito de Olt han sido despedidos. También Ionel Vasilica, jefe del Servicio de Telecomunicaciones Especiales, ha presentado su dimisión. El martes, en el Consejo Superior de Defensa del País, a solicitud del presidente, será presentado un informe preliminar sobre lo sucedido en Caracal. Klaus Iohannis ha puntualizado que las dimisiones de todos los que han malgestionado el caso son obligatorias, pero esto no es suficiente ya que hace falta eliminar las causas profundas que hicieron posible semejante drama. A su vez, la jefa del Ejecutivo, Viorica Dancila, ha decidido establecer un grupo de trabajo interinstitucional y crear un plan de medidas urgentes para responder de inmediato a las situaciones críticas.