Efectos de las lluvias y las tormentas
Rumanía se enfrenta a fenómenos meteorológicos intensos caracterizados por inundaciones, tormentas eléctricas, viento fuerte y granizo.
Roxana Vasile, 15.06.2018, 15:19
La Antártida se dirige hacia un desastre. Esta ha sido la opinión de un equipo internacional de científicos que han realizado un nuevo estudio muy preocupante. El documento lanza una señal de alerta sobre el futuro de la Tierra. Según los expertos, el continente blanco ubicado en el Polo Sur perdió casi tres billones de toneladas de hielo desde 1992 hasta 2017, suficientes como para elevar el nivel del mar en casi 8 milímetros, y esta tendencia ha venido agravándose de manera dramática en los últimos 5 años.
Este fenómeno, si no actuamos para frenarlo, podría amenazar a cientos de millones de personas que viven en las costas. Y este no es el único efecto del calentamiento global, un tema lamentablemente ignorado por algunos factores de decisión incluso de alto nivel. Frente a Rumanía, la Antártida está ubicada en el fin del mundo, y las señales alarmantes que proceden de este continente se disipan en proporción directa a la distancia que las separa. Desde hace años, los rumanos que han venido afrontando fenómenos extremos atípicos para el clima templado continental de nuestro país, han empezado a tomar conciencia de la situación y a reflexionar sobre posibles peligros. La primavera y el otoño han llegado a ser estaciones casi inexistentes, en verano hace mucho calor, la nieve casi ha desaparecido en invierno en algunas regiones del país y también se producen tormentas.
Estos días, en Rumanía las temperaturas han superado los valores normales para esta época del año y se han producido fenómenos meteorológicos intensos caracterizados por lluvias, tormentas eléctricas, viento fuerte y granizo. Las tormentas han afectado a muchos distritos del país. En algunas ciudades se han inundado sótanos, casas, calles y aparcamientos. Decenas de árboles se han desplomado sobre coches, edificios y cables de electricidad, el viento ha dejado techos derribados y se han producido incendios. En la zona rural, muchas casas han quedado inundadas y ha habido cortes de luz. El granizo ha destrozado decenas de hectáreas de maíz, trigo y girasol.
El granizo de tamaño de un huevo ha causado daños en algunas localidades del oeste del país donde ha habido derrumbe de techos y averías de coches. El tráfico vial y ferroviario se ha visto perturbado en algunos lugares. Para las cuencas de la mayoría de los ríos del país se ha decretado alerta roja, naranja o amarilla por inundaciones. El Ministerio del Interior ha anunciado que ha movilizado más de 3.300 bomberos en todas las zonas afectadas. En general la situación es bastante grave. Por lo menos hasta el próximo sábado, se espera tiempo inestable en todo el territorio de Rumanía.
(versión española S.Sarbescu)