¿Está preparada Rumanía para un nuevo terremoto?
El pasado 4 de marzo se conmemoraron los 40 años desde el asolador terremoto del año 1977, que con una magnitud de 7,2 en la escala de Richter, es el más grave que ha sacudido Rumanía que está situada en la zona de contacto de dos placas tectónicas.
Mihai Pelin, 06.03.2017, 12:33
Bucarest sigue siendo vulnerable ante un gran seísmo, han advertido las autoridades, que han añadido que un terremoto parecido al del 4 de marzo de 1977 podría tener los mismos efectos devastadores que hace 40 años.
Conforme a las estadísticas, 800 de los más de 130.000 edificios de la capital podrían tener problemas si semejante fenómeno se produjera. El Ayuntamiento General de la capital intenta modificar la ley para permitir la evacuación sin problemas de los propietarios de estos inmuebles y empezar la consolidación de los mismos.
También existen problemas a nivel nacional, situación evidenciada por la titular de Desarrollo, Sevil Shhaideh, que ha declarado que para rehabilitar los edificios con riesgo sísmico los ayuntamientos no solicitan dinero.
“El nivel de absorción de este programa no supera el 10% de la cantidad de dinero asignada. También este año tenemos asignados 25 millones de lei para financiar la rehabilitación de los edificios con riesgo sísmico. Esperamos las solicitudes de las autoridades locales. Hay unas condiciones especiales de adhesión a este programa que ofrece al ciudadano la posibilidad de recibir financiación para la consolidación de la vivienda.”
Educar a la población para que sepa cómo reaccionar en el caso de un terremoto representa un objetivo que conllevaría la salvación de muchas vidas humanas, ha apreciado a su vez, el secretario de estado del Ministerio de Exteriores, Raed Arafat.
“En los últimos años nos hemos preocupado por educar a la población en este espíritu. Consideramos que el primer factor importante en el caso de semejantes desastres es la ciudadanía. Si cada uno de nosotros supiera cómo comportarse en los primeros minutos del seísmo, podríamos salvar muchas vidas.”
No existe la posibilidad de anticipar cuándo se producirá un seísmo fuerte, ha explicado el director del Instituto Nacional de Física de la Tierra, Constantin Ionescu. Este ha subrayado que Rumanía figura entre los pocos países que están conectados a un sistema de advertencia de alto rendimiento.
“En el presente, en ninguna parte del mundo existe la posibilidad de anticipar con antelación la producción de un seísmo. El único instrumento desarrollado en este momento son aquellos sistemas de alerta sísmica que funcionan en Japón, México, Taiwán y Rumanía, sistemas que informan a las autoridades con una antelación de 35 segundos, para que puedan parar la actividad.”
La situación era diferente en 1977 cuando en Rumanía se produjo el terremoto más violento del período postbélico durante el cual perdieron la vida más de 1500 personas, en su mayoría en la capital. Resultaron destruidas o averiadas severamente casi 32.000 viviendas y el seísmo generó una crisis económica y social que, en opinión de los historiadores, la dictadura comunista no pudo superar hasta su caída en 1989.