Reabierto el proceso penal del expediente de la Revolución de 1989
En Rumanía, los fiscales militares de la Fiscalía General han reabierto el proceso penal en el caso de la Revolución de 1989, por crímenes contra la humanidad.
Corina Cristea, 03.11.2016, 14:42
Casi 27 años después de la caída del régimen de Ceauşescu, los fiscales militares han reabierto el proceso penal en el ”caso de la Revolución», incluyendo en el expediente el delito de crimen contra la humanidad y los hechos cometidos después del 22 de diciembre de 1989. Los incidentes armados que se produjeron en muchas localidades en aquel periodo indican la existencia de un plan de acción bien establecido, que pretendía apoyar la toma del poder por parte de los nuevos líderes del país, indica el comunicado de la Fiscalía, presentado por Marian Lazăr:
”Los datos del expediente indican que, después del 22 de diciembre de 1989 y con el fin de mantenerse en el poder, los nuevos líderes políticos y militares, a través de sus medidas y acciones, causaron la muerte, la lesión de la integridad física y psíquica y la privación de libertad de miles de personas, lo que puede ser considerado un delito de crimen contra la humanidad.”
Los hechos ocurridos indican la existencia previa de un plan de acción, destinado a generar confusión entre las filas del ejército, dividiendo la dirección del Ministerio de Defensa Nacional, enviando órdenes, informes y datos falsos para que la gente saliera a la calle con las armas en la mano. De esta forma, todo parecía una guerra civil entre unidades armadas del Ministerio de Defensa Nacional y el Ministerio del Interior, creada para entregar el poder y legitimar a los nuevos líderes. Para realizar este plan, fue utilizada la Televisión Rumana, que transmitía falsos rumores y discursos alarmistas. Las conexiones telefónicas fueron cortadas y los jefes de los Ministerios sustituidos por antiguos oficiales leales al nuevo poder político-militar, lo que provocó una guerra psicológica y mediática que causó numerosas víctimas, señala el comunicado. Según un documento enviado por la Fiscalía Militar del Alto Tribunal de Casación y Justicia, más de 1200 personas fueron asesinadas durante los acontecimientos ocurridos en diciembre de 1989. De ellas, unas 800 murieron después de la caída del régimen, el 22 de diciembre. Más de 5.000 personas resultaron heridas y otras miles de personas fueron sometidas a malos tratos y privación de libertad. La reapertura del expediente de la Revolución, en el que Rumanía ya ha recibido numerosas condenas por parte del CEDO, se produce algunos meses después de que el fiscal general en funciones, Bogdan Licu, solicitase que se reanudara la investigación. Según Bogdan Licu, la decisión de cerrar el expediente en octubre de 2015, ha sido injusta e ilegal, y además se han cometido graves errores en el acto jurídico.
(traducido por Simona Sarbescu)