El nuevo curso escolar
En Rumanía, más de 3 millones de alumnos han tomado por asalto, este lunes, los jardines de infancia, las escuelas y los liceos, porque ha empezado el nuevo año escolar. Igual que cada año, vamos a señalar tanto las cosas buenas como las malas del sistema. Existen escuelas de cuyo aspecto, tanto los directores como los padres de los niños están muy contentos, porque han sido renovadas y dotadas de muebles y pizarras nuevos. En el polo opuesto existen unidades de enseñanza que funcionan en condiciones precarias, donde las obras de renovación nunca concluyen, y los alumnos se ven obligados a estudiar amontonados en dos o tres salas que no han sido renovadas desde hace más de un decenio.
România Internațional, 14.09.2015, 18:13
Existen también escuelas que no han recibido autorización sanitaria para su funcionamiento, dado que los espacios ya no corresponden a los requerimientos del tercer milenio o porque faltan los servicios médicos y el personal correspondiente ya que las plazas quedan vacías porque ni los médicos y ni las enfermeras están interesados en ocupar semejantes puestos.
Una de cada cinco unidades de enseñanza de Rumanía no ha recibido autorización de funcionamiento para el año escolar 2015-2016, la mayoría de ellas en el medio rural. A la pregunta: ¿qué calificativo daría al modo en que se han efectuado los preparativos para el nuevo año escolar?. El titular de Educación, Sorin Campeanu, ha precisado lo siguiente:
“Conforme con el sistema rumano de evaluación de 1 a 10, daría los calificativos 8 y 9, considerados calificativos buenos. Organizamos una video conferencia con todos los inspectorados escolares departamentales, pasamos revista a nivel de infraestructura, de manuales escolares y personal didáctico calificado, de todos los problemas importantes y todo esto justifica mis calificativos.”
En consecuencia, a la mayoría de los alumnos no les queda más que empezar a estudiar durante los 175 días de cursos, divididos en dos semestres. Conforme con las modificaciones operadas recientemente por el Ministerio de Educación, las vacaciones de invierno se prolongarán una semana más, desde el 19 de diciembre hasta el 10 de enero, y las grandes vacaciones, las de verano, empezarán con un atraso de una semana, a partir del 24 de junio.
Cabe subrayar también que hace poco, el Gobierno ha decidido pagar, para los alumnos de los últimos grados de liceo, cuya cifra asciende a 362.000, los gastos para la adquisicón de los manuales escolares, dentro del límite de 55 lei, esto es casi 12 euros. Otra novedad surge también en la organización y el desarrollo de los exámenes nacionales y de ingreso al liceo.
Tampoco podemos descartar a los profesores, que por primera vez, tras un largo período de tiempo, tienen promesas de recibir aumentos salariales. De la decisión que se tome a este respecto, dependerán las futuras posibles protestas en el sistema de educación.
