Rumanía, un modelo europeo en cuanto a las minorías nacionales
Una conferencia internacional bajo el títuloMinorías étnicas en Europa - retos y perspectivas, ha reunido en Timisoara, ciudad situada en el oeste de Rumanía, a varios representantes de Europa Central y Oriental. En Rumanía existen en el presente 18 mi
Corina Cristea, 09.07.2015, 15:25
En 2015 se cumplen 20 años desde la adopción por el Consejo de
Europa y desde la ratificación por
parte de Rumanía, de un convenio marco para la protección de las minorías nacionales, y con
este motivo el Ministerio Rumano de Exteriores ha organizado en Timisoara, una
conferencia con este tema. Los participantes, representantes de Europa Central
y Oriental, han debatido la situación actual de las organizaciones de juventud
y sus planes de desarrollo a largo plazo. La esencia del multiculturalismo es
reconocer, proteger y fomentar la diversidad en una sociedad,
en base a la identidad de cada grupo minoritario, ha declarado el jefe de la diplomacia de Bucarest, Bogdan
Aurescu.
El ministro rumano de Exteriores ha destacado la evolución constante,
en los últimos dos decenios, de las políticas desarrolladas por Bucarest en
cuanto a las minorías nacionales: desde
políticas de asimilación hasta políticas de respeto y de fomento de las
diferentes identidades. Rumanía
ha comprendido que la diversidad cultural’ la multiculturalidad y la
interculturalidad, son valores esenciales de la democracia, de las sociedades
que se basan en el respeto y en una convivencia pacífica, ha añadido el jefe de la diplomacia rumana.
Según Bogdan Aurescu, Rumanía no sólo apoya la protección de la identidad de
las minorías nacionales, sino también implica a los representantes de estas
minorías en el proceso de toma de decisiones de la sociedad rumana en su
conjunto.
Rumanía ha logrado
crear un verdadero modelo intercultural de interacción entre la mayoría y la
minoría. Se trata de un modelo que hace hincapié en
la diversidad cultural, es un modelo que, claro está, se puede mejorar
continuamente, incluso en lo que se refiere a su aplicación o en lo
que atañe a su marco, pero que supera con creces muchos modelos europeos
actuales en lo que se refiere a la protección de las minorías nacionales.
El modelo de interculturalidad fomentado por
Rumanía contempla afirmar y conservar la esencia identitaria -étnica,
lingüistica, cultural y religiosa- pero también definir un espacio cultural
integrador, tolerante, basado en el diálogo interétnico, en conocer el respeto
mutuo. En opinión de los políticos de Bucarest, el fin de estas políticas
relativas a las minorías nacionales es doble:
por una parte, proteger la identidad específica de las personas pertenecientes a
una minoría nacional y, por otra parte, asegurar una convivencia agradable
entre la minorías y la mayoría, pero también entre distintas minorías. De esta forma, la atención no se centra solo en la necesidad de fomentar y conservar la identidad
de las personas que pertenecen a una minoría, sino también, en la necesidad de
integrarlas en la sociedad en la que viven. Las políticas definidas de este
modo contribuyen a la creación de unas sociedades tolerantes, basadas en el
diálogo intercultural
y que previenen los conflictos.