Efectos de la reducción del IVA a los alimentos
La reducción del IVA a los alimentos, una propuesta del Ejecutivo rumano, ha recibido el visto bueno de los senadores. Los rumanos esperan que esta medida tenga efectos positivos para ellos y para la economía
Ştefan Stoica, 13.05.2015, 14:49
Al ser una parte importante del ambicioso programa gubernamental de relajación fiscal, la reducción del IVA a los alimentos a partir del 1 de junio ha recibido el visto bueno de los senadores de Bucarest. Esta medida supone la reducción del IVA del 24 al 9% para los bienes alimenticios, las bebidas no alcohólicas, los servicios de restaurante y catering. De hecho, representa una alineación al nivel del IVA al pan y a los productos de panificación. Aunque el Ejecutivo la considere una manera de fomentar el consumo e, implícitamente, de consolidar la tendencia ascendente de la economía, desde el principio, esta medida ha sido recibida con escepticismo respecto a la reducción significativa de los precios de venta.
A esto se ha añadido la sospecha de que los supermercados hayan aumentado los precios de manera anticipada para mejorar sus beneficios. El mercado regulará la situación, y el IVA reducido se reflejará de manera indiscutible en los precios, ha afirmado el primer ministro Victor Ponta. Por lo demás, los cálculos presentados por el Ministerio de Agricultura prevén que los precios de los alimentos se reducirán en aproximadamente el 12%. La población comparte en gran medida el optimismo de las autoridades. La mayoría de los rumanos consideran que la reducción del IVA a los alimentos y en las bebidas no alcohólicas representa una buena medida tanto para ellos, como para la economía, según ha mostrado un barómetro de opinión realizado por la compañía Inscop Research y solicitado por el periódico Adevărul. Sin embargo, un 34,5% de los encuestados consideran que la reducción de las tasas y de los impuestos, según el nuevo Código Fiscal, significa menos dinero para la sanidad, la educación y las infraestructuras. Sin embargo, casi un 39% de los rumanos tienen otra opinión.
Aproximadamente un 27% todavía no se ha formado una opinión respecto a este asunto o no han deseado contestar, lo que significaría un índice de la falta de información o de comprensión de los mecanismos económicos y presupuestarios, según destacan los autores de la encuesta. El mismo barómetro indica que un 37,7% de los rumanos prevén que se reducirán los precios, pero que la reducción de los mismos no cumplirá totalmente con la reducción del IVA. Aproximadamente un 33% de los encuestados consideran que los precios de los alimentos y de las bebidas no alcohólicas no se reducirán en absoluto, mientras que el 19% opinan que los precios bajarán, cumpliendo con la reducción del IVA.
Un 57% de los rumanos consideran que la reducción del IVA a los alimentos y a las bebidas no alcohólicas se reflejará en la reducción de los precios de venta. El sondeo muestra que un 62% de la población está de acuerdo con la decisión del gobierno de reducir el IVA a estos productos del 24 al 9%, frente a la idea de la reducción general del IVA del 24 al 20%, preferida por tan solo el 29%. El barómetro fue realizado por la compañía Inscop Research y solicitado por el periódico Adevărul entre el 23 y el 30 de abril a 1.085 personas y con una margen de error de más o menos el 3%.